Con el cierre de la segunda quincena de octubre, las alarmas se encendieron en la SHCP, el motivo es que Pemex le dejó de trasladar a Hacienda los derechos de utilidad compartida.

 

Son los impuestos que cada mes entrega por venta de crudo y combustibles, que realiza la paraestatal.

 

De los 38 mil millones de pesos que SHCP, esperaba recibir de Pemex en el tercer trimestre de (agosto, septiembre, y octubre) de del 2023, apenas alcanzó a recibir 4.0 mil millones; es decir, solo cubrió una décima parte.

 

Acumulando los primeros 9 meses de este año de (enero a septiembre) SHCP esperaba de Pemex 377 mil millones de pesos, lo más que pudo hacer la paraestatal del petróleo fue entregar 240 mil 183 millones de pesos.

 

Eso es una caída del 36 por ciento de lo que se esperaba en esos primeros nueve meses y un 45 por ciento de desplome a tasa anual.

 

A ese drama financiero de Pemex y su impacto en la SHCP, se le suma una tragedia más.

 

Pemex dejó de pagar a proveedores, dirán que no es nada nuevo, que la paraestatal tiene ya la fama bien ganada dejar colgados fuertemente sus adeudos, castigando a sus proveedores de servicios nacionales y extranjeros.

 

Muchos litigios en México y en Estados Unidos dan fe de que Pemex carece del capital necesario para hacer frente a sus adeudos de servicios ya otorgados o de crudo y gas entregado por quienes tienen bajo su explotación pozos privados.

 

La diferencia ahora es que el problema ya fue puesto por escrito en un comunicado de alta prioridad que el director de Pemex, Octavio Romero, le mando al secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, el 18 de septiembre de 2023.

 

El comunicado, muestra la gravedad de lo que está sucediendo, la empresa H. Emergí notificó a Pemex que entraría ya en una demanda de controversia por el incumplimiento en el pago de un adeudo de 187 millones de dólares; es el monto del crudo que la corporación privada le ha entregado a Pemex de lo que ha extraído del llamado Bloque Hochi, uno de los que fueron asignados en las rondas de privatización de yacimientos al cierre del anterior sexenio.

 

Esto llegó a un diferendo entre el secretario de Hacienda y el director de Pemex. Octavio Romero admite en su escrito que el caso de los seis meses de adeudos a Hochi, es el caso de todos los proveedores de la paraestatal, reconociendo la enorme crisis financiera del monopolio de los energéticos en México.

 

Pemex no solo está imposibilitado en cumplir con el pago de impuestos, sino lo grave es que ya cerró su ventanilla de pagos a quienes le prestan servicios.

 

En esa misma misiva Octavio Romero dice a Rogelio Ramírez: “No omito manifestarle que el día de ayer fueron pagados, a la SHCP, 22 mil millones de pesos por concepto de IVA más IEPS y que el día 30 de septiembre vence un bono de deuda internacional de 1,110 millones de dólares, los cuales nos dejan en una posición de caja muy comprometida que nos impedirá pagar a nuestros proveedores por lo menos este sexto mes de adeudos vencidos.

 

El director Octavio Romero, le reconoce al secretario Ramírez de la O: “Como podrá usted observar, la situación de Pemex cada día es más crítica y amerita soluciones prontas y expeditas”. Lo cierto es que, al cierre del tercer trimestre, los números de Pemex lucen preocupantes y de muy alta prioridad.

 

La utilidad de operación cayó de 116 mil millones para ese mismo periodo, en 2012, a solo 31 mil millones en 2023.

 

Para cerrar la tragedia de los proveedores, tal parece que Pemex y la Comisión Reguladora de Energía no se hablan. Ante la falta de pago de Pemex, algunas corporaciones están pidiendo a la Comisión Reguladora de Energéticos, el ajuste en los plazos y tiempos firmados, pero tal parece que a los reguladores de energía el incumplimiento de Pemex les tiene sin cuidado y solo eso sino también amenazan con cancelar concesiones.

 

Son decenas de miles de empleos en juego y, sobre todo, la sobrevivencia financiera de la fuente primaria de aportaciones a la Economía Nacional.