Los carteles de la droga mexicanos, se han convertido en parte central del discurso político en los Estados Unidos, una semana después de las elecciones intermedias.

 

En su primera acción ejecutiva como gobernador electo de Texas Greeg Abbott, ratificó a las redes criminales mexicanas como “organizaciones terroristas” y declaró una invasión en la frontera. Esta declaración está basada en un documento de trabajo del (CENTER FOR RENEWING AMERICA 'S), un grupo de expertos financiados por el comité acción política de Donald Trump que propone subir a  escrutinio judicial y financiero a los carteles de la droga de México.

 

De acuerdo a la interpretación que los asesores de G. Abbott, han hecho del (artículo 1 sección 8 y artículo 5 sección 4 de la Constitución de Estado Unidos), la declaratoria de invasión hecha por el gobierno de Texas, implica que los estados adquieran facultades amplias para enviar agentes de seguridad a territorio mexicano, sin la autorización de gobierno federal en este caso la administración demócrata de J.Biden , la seguridad nacional de México ha tomado un lugar cada vez más preponderante, en la agenda del “estado profundo” en Washington.

 

G. Abbott está insistiendo al gobierno de Biden, para que la designación de los carteles mexicanos como organizaciones terroristas se convierta en una política clave a nivel federal, a pesar de haber retenido el control del senado con 50 senadores demócratas, los están escuchando este tipo de reclamos el discurso posterior a las elecciones de medio término el presidente Biden, declaró que ante la situación de un congreso dividido la casa blanca, va impulsar la “agenda de unidad” en la que uno de los puntos centrales será el combate de la crisis de la “sobredosis por opiáceos” la mayor parte de las 108 mil muertes registradas en 2021 corresponden a sobredosis de anfetaminas, una droga en que los carteles mexicanos han desplazado a las organizaciones chinas como principales productores de acuerdo a reportes de la propia DEA.

 

Días después de las elecciones intermedias la prensa estadounidense comenzó a circular la versión de que Klain, jefe de gabinete de Biden, podría dejar su puesto a inicios del 2023.

 

El 12 de noviembre Christian Magnus, comisionado de la agencia de aduanas y protección fronteriza renunció, después de meses de prisión por el partido republicano, por críticas de mantener políticas ligeras con el crimen organizado en la frontera, esto se ha entendido como un signo inequívoco de que la posición de Washington, ya cambio el hecho de que el partido republicano haya recuperado la mayoría de la cámara de representantes con 218 escaños, significa un cambio fundamental en la asignación de presupuesto en las prioridades estratégicas y política, legislativas del congreso.

 

El republicano de Texas Crenshaw, presentó como iniciativa la “ley de declaración de guerra a los carteles”, en sus palabras esta legislación incrementa significativamente las penas federales contra los cárteles mexicanos, por su enorme poder financiero.

 

Boby Menéndez, senador demócrata por Nueva Jersey, que ha polemizado directamente con el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, seguirá en la influyente posición de presidente de comité de relaciones exteriores del senado,  independientemente de quien tome el control del partido republicano, ya sea el grupo de Donald Trump o el grupo del reelecto gobernador de Florida Ron DeSantis.

 

La derecha estadounidense utilizará a México, como un botín político de cara a la sucesión presidencial estadounidense 2024, por eso los demócratas están respondiendo.

 

Se vislumbra que después de las elecciones intermedias del pasado martes, la relación de seguridad entre Estados Unidos y México, empezará a cambiar de manera importante.