Llego a la Presidencia a la tercera, después de igual número de campañas a ras de suelo por todos los estados del país y la mayoría de municipios. Ha sido el político mexicano con mayor cercanía con la gente, de mayor contacto en la relación gobernante – gobernado, si se toma en cuenta que fue Jefe de Gobierno de la Ciudad de México.

 

No quiso pisar los Pinos y se fue a despachar a Palacio Nacional donde recibe a personas comunes y a personajes de la política; a adeptos y disidentes; a empleados y desempleados a capitalinos y provincianos.

 

Eso lo hace distinto a otros que le antecedieron con casi nulo contacto con la gente y protocolos fríos y acartonados.

 

En seis meses de gobierno ya recorrió todas las capitales de los estados del país y en segundas vueltas visita municipios distintos a las sedes de los poderes locales.

 

Caso Tlaxcala visitó la capital (31 Enero) y Apizaco (31 de Mayo), conoce como ningún otro político, usos y costumbres de los sectores de la población, su gente, al pueblo.

 

Desde la Ciudad de México como gobernante fijaba agenda desde temprana hora con conferencias de prensa, como presidente también lo hace de lunes a viernes (un solo dato Peña Nieto siempre rehuyó encuentros d este tipo de comunicadores)

 

El estilo Personal de Gobernar,  de la gente, cerca de los medios, transitando en vuelos comerciales y autos no blindados ni exclusivos, lo hace un gobernante fuerte y poderoso en su estilo.

 

A la mitad del primer año y con el 70 % de aprobación entre la gente, quizás en este caso con el sello más distintivo de cualquier otro gobernante.               

 

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