El secretario de Gobernación precisó que hasta hoy 2 mil 200 integrantes de la caravana habían solicitado asilo a México y 700 su repatriación.
El gobierno de México estima que más de 6 mil migrantes centroamericanos están en el país tras la entrada de dos multitudinarias caravanas por su frontera con Guatemala, dijo este miércoles el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete.
Destacó en conferencia que el gobierno mexicano ya observa el fenómeno como un éxodo migratorio por falta de empleo y oportunidades.
"En este momento tenemos en el país alrededor de 6.000 personas, quizá un poco más, que se encuentran en distintas condiciones, unos regularizando su situación migratoria, otros en marcha, otros pidiendo su repatriación", detalló.
Una primera masiva caravana entró al país el 19 de octubre pasado por el río Suchiate que separa a México y Guatemala, tras salir una semana antes del norte de Honduras, mientras que la segunda ingresó el lunes pasado por el mismo punto.
Aunque la mayoría son hondureños, migrantes salvadoreños y guatemaltecos también caminan en las caravanas.
Navarrete precisó que hasta hoy 2.200 migrantes habían solicitado asilo a México y 700 su repatriación, la mayoría de éstos últimos tras caminar con la caravana.
Los migrantes han dicho que buscan llegar a Estados Unidos en busca de mejores oportunidades, pero el presidente de ese país, Donald Trump, ha reiterado prácticamente a diario que no
El secretario de Gobernación sostuvo que México no criminaliza a los migrantes sin papeles ni hará deportaciones a menos de que sean voluntarias, pero volvió a exhortarlos a que regularicen su entrada al país y con eso tengan la posibilidad de acceder al programa de empleo temporal.
El gobierno federal cuenta con cerca de 80 millones de pesos (3,9 millones de dólares) para ese programa de empleo, que fue anunciado por el presidente Enrique Peña Nieto la semana pasada como un paso para atender la masiva entrada de migrantes, señaló Navarrete.
"Dejo claro esto: la soberanía del país no está en riesgo porque México abra las puertas para que de forma ordenada y pacífica ingresen connacionales que necesitan ayuda de otros países. Al contrario, México tiene una larga tradición en esta materia de dar refugio", planteó.
