Cuando Andrés Manuel López Obrador eligió que Juntos Haremos Historia sería su lema de campaña, pocos imaginaron que una de las formas en que esto se materializaría sería convirtiéndose en la administración que ha dado más contratos por dedazo desde que tenemos registros. En 2020, el Gobierno Federal rompió récords en dos cifras clave:

Los hombres y mujeres más acaudalados del mundo aumentaron su riqueza 18 mil dólares durante el año pasado por cada “nuevo pobre” que, según estimados del Banco Mundial (BM), ha dejado la crisis por el Covid-19. El organismo financiero estima que 100 millones de personas se sumaron a la pobreza el año pasado. Es la primera vez que esta tendencia crece desde 1998 y, como secuela, la desigualdad aumentará en 78 de las 91 economías de las que se disponen datos.

La posibilidad de que órganos autónomos como la Comisión Federal de Competencia (Cofece) y el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) sean ‘absorbidos’ por las secretarías de Estado, representaría un retroceso en materia de regulación, evaluación y control, coincidieron diversos expertos.