Las temperaturas extremas siguen avanzando mientras la situación geopolítica no ayuda en demasía a transitar por el camino correcto en la lucha contra el calentamiento global.

 

Si 2022 te ha parecido más inusual aún que los años anteriores, esto solo acaba de comenzar. A pesar de todas las alarmas que Naciones Unidas y otros organismos han hecho sonar acerca de la necesidad de frenar nuestro impacto climático en el planeta, las emisiones de gases de efecto invernadero siguen alcanzando niveles récord.

 

Un estudio de la World Meteorological Organization (OMM) ya vaticinó a mediados del año pasado que existe una probabilidad de 50:50 de que la temperatura global promedio anual alcance temporalmente 1,5 °C por encima del nivel preindustrial durante al menos uno de los próximos cinco años, en una probabilidad que puede aumentar con el tiempo.

 

No solo lo dijo la Organización Meteorológica Mundial. La probabilidad de que el promedio de cinco años para 2022-2026 sea más alto que los últimos cinco años (2017-2021) también es del 93 %, según Global Annual to Decadal Climate Update, producido por la Met Office de Reino Unido.

 

Son unos porcentajes que han aumentado constantemente desde 2015, cuando esa posibilidad cercana a cero. Pero empezó a aumentar y para los años entre 2017 y 2021, hubo un 10% de probabilidad de superación. Esa probabilidad ha aumentado a casi el 50% para el período 2022-2026. Las cifras no son aleatorias. Solo en 2022, en lo más destacado del año, aparecen olas de calor récord que causaron la evaporación de lagos en Europa y Asia, una sequía catastrófica que trajo miseria a millones en el Cuerno de África e inundaciones devastadoras en Pakistán.

 

Señales de advertencia

Al igual que el clima extremo durante el verano de 2022, el clima inusualmente templado actual es causado por el cambio climático, han explicado innumerables científicos. No solo la temperatura ha alcanzado niveles de calor sin precedentes, sino que también la tasa de aumento de la temperatura es mayor actualmente de lo que ha sido desde mediados del siglo XIX.

 

Las señales de advertencia del planeta se han vuelto cada vez más fuertes. Y esto es solo el comienzo. Según el secretario general de la ONU, António Guterres, el mundo está condenado a convertirse en un "atlas de sufrimiento".

 

En efecto, esto es solo el comienzo, ya que las emisiones que provocan el cambio climático continúan aumentando en la atmósfera y múltiples señales apuntan a serias dificultades para la agenda política en la lucha contra el cambio climático. Muchos países, a causa de la crisis energética derivada de la invasión por parte de Rusia a Ucrania, han vuelto a usar carbón para lidiar con esta situación de crisis, pero el carbón es el peor combustible que podemos aportarle al clima. Nuestras acciones en vez de ir en la lucha contra el cambio climático, parecen estar “echando una mano” al mismo. Y no es algo de lo que podamos sentirnos orgullosos como raza.

 

Si la tendencia continúa...

De hecho, es tan peligroso que muchos expertos exponen que nos estamos acercando a un punto de no retorno. Para que el objetivo de 1,5 grados respecto a los niveles preindustriales siga siendo viable, las emisiones globales deben caer en un 45 por ciento esta década y llegar a cero neto para 2050, por lo que, si seguimos así, las catástrofes climáticas de 2022 se recordarán como las más livianas.

 

Por su parte, el secretario general de la Organización Meteorológica Mundial, Petteri Taalas, anticipó que "las repercusiones de la fuerte ola de calor que azota al continente europeo continuarán al menos hasta 2060, independientemente de los éxitos logrados en los esfuerzos por mitigar los efectos negativos del cambio climático".

 

Pero aún estamos a tiempo. A principios de 2023, 190 países se han inscrito en un plan llamado Marco Global de Biodiversidad (GBF), que tiene como objetivo proteger el 30 por ciento de los ecosistemas terrestres y marinos del mundo para 2030. Cumplir con compromisos como este podría ser la clave para prevenir más desastres en el futuro.

 

Climate Change 2022: Impacts, Adaptation and Vulnerability / IPCC Sixth Assesment Report. Impacts, Adaptations and Vulnerability.