En su mañanera del pasado miércoles 30 de agosto el presidente Andrés Manuel, anuncio que ya estaba listo para ceder, a partir del 6 de septiembre, el bastón de mando a la candidata o al candidato presidencial de Morena, para refrescar memorias, el bastón de mando es el símbolo de liderazgo y autoridad que se le otorga al jefe de la tribu, sería la primera ocasión en la que un presidente de México utiliza ese ceremonial para entregarle el mando en este caso de su partido Morena a quien será el candidato presidencial.

 

En contraparte el ungimiento de Xóchitl Gálvez, se transformó en la otra entrega del bastón del mando opositor de millones de mexicanos cansados de los pésimos resultados del gobierno de Morena, pero el actual usufructuario del bastón de mando.

 

El presidente López Obrador, el viernes 1 de septiembre fue un día desangelado, en el enésimo informe de gobierno nada tuvo de espectacular los mismos lugares comunes, las mismas mentiras, las mismas realidades maquilladas, exhibieron un pobre ejercicio político donde el brillo presidencial nunca apareció.

 

En contraste Xóchitl Gálvez acudió a la Cámara de Diputados en donde en respuesta a ese quinto informe, hizo una glosa compacta de todos los fracasos de las políticas públicas del actual régimen, investida en su calidad de Senadora, se le otorgo la palabra en medio de la estampida de legisladores morenistas, que no parecían mayoría y que abandonaron masivamente el recinto justo cuando Xóchitl Gálvez, hacía uso de la palabra, los correligionarios priistas panistas y perredistas de quién será la candidata del Frente Amplio por México, subieron en cambio a la tribuna para arroparla al grito de ¡Presidenta!, ¡Presidenta!, la “minoría” logro que la mayoría saliera de la Cámara.

 

Los titulares de los medios del sábado no fueron para el quinto informe presidencial sino para la entronización de Xóchitl Gálvez, las imágenes no fueron las del acto presidencial en Campeche, sino la de los brazos levantados en la Cámara de Diputados cobijando a Xóchitl Gálvez, el sabor de boca que dejó este viernes fue que aquel bastón de mando estaba en proceso de transmisión de Palacio Nacional, pero no a alguna corcholata de Morena sino a la candidata del Frente Amplio Por México, para el domingo las diferencias fueron todavía más marcadas, el Presidente López Obrador se aprestó a inaugurar el Tren Maya que todavía no está listo pero que al igual que la refinería de Dos Bocas que aún no refina había que decir que ya está funcionando.

 

En el caso del tren Maya rodo a una velocidad de 60 km por hora se inició el recorrido que se topó con fallas que obligaron al presidente López Obrador, y a su sequito inaugural a detener una hora el recorrido de lo que debía ser una un acto sobre ruedas de una obra a la que se le han invertido más de 325 mil millones de pesos, y mientras el inquilino de Palacio Nacional todavía con su bastón de mando aguardaba la reparación de su Tren Maya.

 

Mientras que en el Ángel de la Independencia de la Ciudad de México y a todo vapor Xóchitl Gálvez, era investida oficialmente con el bastón de mando opositor como la candidata presidencial del 2024, unos veinte mil aspirantes la acompañaron y la vitorearon en un discurso frontal contra un gobierno al que acusó de enorme fracaso de traicionar al “Junto haremos historia” que había prometido.

 

Mientras tanto en los cuarteles de Morena se continuaba debatiendo la seriedad de la encuesta que, para el 6 de septiembre, deberá decidir quién será su candidata o candidato presidencial, lo que se asoma en lo ocurrido el fin de semana es que el presidente está perdiendo su momento político, por eso está urgido de pasar el bastón de mando al elegido o la elegida de Morena, es como el juego de la papa caliente hay que soltarla porque si no te quema.

 

Para Xóchitl Gálvez, en cambio en su debut como la coordinadora de los esfuerzos de la oposición para recuperar la presidencia se inicia con el pie derecho, con ánimo y espíritu de lucha, en el Congreso y en el Ángel de la Independencia ella ya tiene en sus manos el bastón de mando y le está sacando provecho.