Me llamo Aleksandrova. Naci en la Federacion de Rusia y conozco al país desde hace 53 años.
Crecí en una familia próspera. Con padres educados y abuelos. Es cierto que mi país entonces era en 1969 la URSS; actualmente vivo en la oblast (region) de Moscú..
Crecí como la mayoría de los niños de esta gran nacion desarrollánome en jardín de infantes, escuela deportiva, campamentos de pioneros escolares y asi, hasta la escuela de pedagogia para la educación social tarea urgente para Rusia despues de la 2a Guerra Mundial. Todo fue gratuitamente. Así crecieron todos los niños y jovenes de la URSS.
Nuestros padres trabajaron en las mismas empresas durante años, porque no había razón para cambiar algo. Todos tenían aproximadamente las mismas condiciones de vida; el tamaño de los pagos por trabajo, el descanso garantizado, los sanatorios; los fines de semana, las vacaciones de maternidad, etc. Citas de hospital pagadas. Pensiones garantizadas. Todo eso sucedio.
Y la mayoría de la gente se adaptaba a esta situación, a la cosmovisión cotidiana. Pero hubo quienes miraron y buscaron el mundo más amplio. Querían libertad, mas grandeza, nuevas oporunidades de realizacion personal y colectiva para Rusia y las demas naciones.
Querían los jovenes conocer el mundo, con sus ojos, con su mente; re-construirlo. Y parecia incomprensible, personalmente y para muchos ¿por qué no vivir de una manera diferente y que sea accesible la felicidad para cualquier persona?. Ver la vida con una mentalidad diferente mas veloz y creativa, una percepción diferente, un grado mas profundo de humanismo y economia; una diferente comprensión de la libertad universal para todos los países.
Y entonces así, esas personas ya no eran necesarias para el Estado, como sucede ahora con la globalizacion. Con tales politicas es difícil descubrir y aceptar el hecho de que hay líneas impuestas por las estructuras de poder politico y financiero nacional y global por la cual es imposible (algunas razón de poder impuesto: salarios insuficientes, sobornos o manipulacion).
La vida asi, no está clara ni atractiva. Al crecer, te das cuenta de que recibes lo más necesario del Estado, pero al mismo tiempo, debes ser completamente obediente y no meterte con preguntas incómodas. Así es cualquier poder. Y asi, crecí con esa pregunta en mi cabeza y con tales desacuerdos adentro...
Y así llegó la Perestroika. Fue una locura en el país; fue un movimiento, no un pantano sin marca y, la gente se intoxicó por eso que parecia libertad y no se dio cuenta, en este frenesí, que se reemplazó con otro mismo o nuevos estancamientos que tanto gustan al espejismo del capitalismo prometiendo democracia y libertad con pobreza desde hace 500 años, despues de la Edad Media.
Y asi, continua en el mundo esa misma anarquía de busquedas ilegales de las transnacionales que a veces parecen ser mas fuertes que la ley con margenes variables en una dirección u otra que parecían estar a punto de ganar el sentido común. Y luego, la gente por costumbre, no se metió al desierto de la política, por el habito de la no participacion como se acostumbra en las manipulaciones de la globalizacion en Europa, America y, en general, creyendo que la ley del sentido común no existe.
Sí, siempre hay injusticias en los abusos de poder pero, aun asi en general hubo mejoras. ¿De qué estoy hablando? Del hecho de que no puedes ser tan ciego y distante a lo que está sucediendo en cada pais con las estructuras de poder global apropiandose del patrimonio de la humanidad.
Porque ello, ya viene lo que vendrá en cada pais. Entonces, es urgente que las personas aprendan a ser ciudadanos por sí mismas y darse cuenta de que tienen la misma responsabilidad que las acciones del gobierno y peor aun mas, que aquellos que toman decisiones cobardemente desde el anonimato.
Moscu, Rusia.
