(Yessica Ayala) La ceniza volcánica no es un abono para las plantas, incluso a algunas plantas las quema y les afecta hojas, flores y frutos, por lo que no es recomendable dejarles la ceniza o tener la creencia de que sirven para su crecimiento, pues tapa sus poros y obstruye la fotosíntesis, acción natural que les sirve de alimento para poder vivir.
Sobre el tema el agrónomo e investigador de la Universidad Tecnológica de Izúcar de Matamoros (UTIM) Mario Romero explicó que el exceso de ceniza que ha caído por un mes en nuestra región afecta las hojas y el desarrollo de las plantas, lo han estado revisando por este tiempo y ya tenían antecedentes desde las pasadas erupciones.
“Nos afecta el desarrollo vegetativo de las plantas al no tener las hojas limpias las plantas no producen muy buenas fotosíntesis y eso ocasiona que demerite su crecimiento y su calidad”
En el caso de hortalizas al no tener un buen follaje también las afecta y pica las frutas, así como el crecimiento en los cultivos de jitomate, las calabazas y otros productos que al demeritar su calidad se ve reflejado en el precio final.
Los posibles cambios que puede haber en la tierra son más paulatinos y tiene que haber un proceso de degradación de la ceniza que está cayendo en el suelo, pero si no existe ese proceso o es demasiada ceniza, como es el caso, es mucho más perjudicial.
Los productores tendrán que hacer más labor, no sólo la habitual del campo, sino también de limpieza, en los frutos y flores para quitar toda la ceniza impregnada.
Las recomendaciones a seguir es mantener lo más sanos posible en el cuidado de lo que se consume, “básicamente es que laven todos las frutas y verduras, que la laven, que las desinfectamos, como solemos hacerlo cotidianamente, en el caso de las flores pues sí está en nuestro jardín basta con echarle agüita para que se asiente y se va a ir incorporando esos minerales a lo que es nuestro suelo” agregó el agrónomo y asesor en la zona de Cabrera.
