Cada pene y cada dueño de pene son diferentes, necesitan y desean cosas distintas, y no estamos hablando de diferentes posturas sexuales, que también, sino a otro tipo de cosas. Cada pene tiene un tamaño distinto, puede hacer unas cosas si es grande y otras diferentes si se trata de un pene pequeño, y necesita un tamaño de condón u otro.
En este artículo vamos a hablar precisamente de esto último, de todas las opciones de condones que actualmente existen en el mercado y qué características tienen. Pero empecemos por el principio.
¿Por qué tenemos que usar preservativo?
El preservativo continúa siendo hasta el día de hoy la mejor forma de evitar embarazos nos deseados (98% de eficacia) y de protegernos frente a enfermedades de transmisión sexual como la clamidia, la gonorrea o la hepatitis B, entre otras (en torno a un 80-90% de eficacia). Lo único que hace falta es colocarlo de una forma adecuada.
Elegir un condón según tu tamaño de pene
Aunque existe una medida estándar de preservativo, no todos los penes son estándar. Por lo tanto lo mejor es que tomes medidas y busques el que mejor se adapta a tus dimensiones.
Habitualmente el problema está en la anchura y para medirla lo mejor es que utilices una cinta métrica flexible, midas la circunferencia de tu pene en erección y dividas esa cantidad entre dos. El resultado será el ancho nominal que debería tener el preservativo que mejor se adapta a ti.
Los preservativos estándar tienen entre 52 y 56 mm de ancho nominal, pero hay algunas marcas que ofrecen anchos mucho más diversos.
Preservativos con texturas
Muchas marcas ofrecen preservativos con diferentes texturas destinadas a intensificar las sensaciones. Esta elección, no solo depende de los gustos del chico, ya que las texturas también pueden influir en lo que sienta la otra persona o personas participantes en la relación.
Habitualmente los preservativos con texturas tienen puntos o estrías en su superficie.
Preservativos con efectos
Aparte de las propiedades físicas de los preservativos, a estos se les pueden añadir productos que provoquen diferentes efectos en los que los llevan puestos. Algunos de estos efectos, pueden ser simplemente para contribuir a la excitación y otros pueden tener una función específica.
Entre los primeros estarían los preservativos que provocan sensación de frío, calor u hormigueo. Aunque definitivamente no son para todo el mundo, hay muchas personas que los encuentran divertidos.
Entre los segundos, tendríamos, por ejemplo, los condones que tienen una función retardante (llevan algún tipo de anestésico suave), que pueden aliviar un poco los problemas de hombres con eyaculación precoz. Otros preservativos lleva cremas espermicidas, lo que los hace aún más seguros frente al riesgo de embarazos.
Además de estos tipos, también podríamos meter aquí a los preservativos con sabores, cuya función es aportar algo divertido a las relaciones sexuales.
Preservativos extrafinos
Hay penes más sensibles que otros y algunos necesitan preservativos más finos que les permitan disfrutar de las relaciones. Para ellos, se han creado auténticas joyas de la ingeniería, que incorporan diversas tecnologías para aumentar el placer.
Incluyo ya hay preservativos que se adhieren a la piel y además es más difícil que se resbalen cuando la erección no se mantiene.
Preservativos sin látex
Finalmente, algunos chicos o chicas tienen alergia o hipersensibilidad al látex. Para ellos se han creado condones que no tienen este material, muy habitual en la mayoría de preservativos, y que les permiten tener relaciones sin preocuparse de ese problema.
