Su primer vacuna: lágrimas y sollozos por parte de tu pequeño. Aunque sabes que es por su bien, no puedes evitar que se te encoja el corazón al pensar en su dolor.
Desde su primer año de vida los bebés reciben más de 10 vacunas, lo que se traduce en momentos de angustia y estrés. Los padres esperan a la salida de la consulta para calmar al bebé y hacerlo sentir mejor. Pero, ¿por qué esperar hasta el final si lo puedes hacer al momento?
De acuerdo con un estudio realizado por el Hospital Universitario de Sevilla, es conveniente y posible dar pecho a los bebés durante la vacunación, para que entren en un momento de calma y relajación.
Tetanalgesia para calmar el dolor
Tetanalgesia, combinación de las palabras 'teta' y 'analgesia', es una técnica que forma parte de los múltiples beneficios de la lactancia materna.
De acuerdo con la investigación realizada por el Hospital Universitario de Sevilla, la tetanalgesia:
«Es un término novedoso que hace referencia a un método de analgesia no farmacológica utilizada en lactantes, basada en la utilización de la lactancia materna como método para aliviar el dolor provocado por procedimientos dolorosos de carácter leve-moderado».
La tetanalgesia consiste en dar pecho al bebé durante el momento en el que se realizará alguna acción dolorosa o incómoda, como la aplicación de vacunas o exámenes clínicos.
El contacto con la madre, así como la leche, ayudan a disminuir el dolor y crean un tipo de anestesia para el bebé.
La Dra. Noni MacDonald explica en un artículo para la Organización Mundial de la Salud:
«Aunque no suelen decirlo en el consultorio, los estudios demuestran que casi la mitad de las madres se preocupan por el dolor que puedan sentir sus hijos durante la vacunación. Nadie quiere que le hagan daño a su bebé».
Beneficios de practicar la tetanalgesia
Es el método analgésico no farmacológico (sin medicamentos) más idóneo para calmar el dolor en los bebés. No implica gastos adicionales y tampoco contiene sustancias que pueden dañar el estómago del bebé, como ocurre con otros analgésicos.
El principal beneficiado será el pequeño, pues entrará en una zona de bienestar y tendrá alivio y calma del dolor, así como consuelo. En cuanto a la mamá, tendrá una mayor tranquilidad y descanso. Asimismo, crecerá la confianza en su capacidad para el cuidado del bebé e incrementará el vínculo madre-hijo.
La parte médica también resulta beneficiada al tener un mayor control de la situación, lo que a su vez facilita procesos como la vacunación. Además, ayudará a verificar con la madre si la técnica de amamantamiento es la correcta y poder corregir errores.
Otros beneficios de la lactancia
Las bondades del amamantamiento son reconocidas mundialmente, ya que según la OMS es la forma ideal de aportar los nutrientes que un bebé necesita para su desarrollo, además de que lo protege de enfermedades por los anticuerpos que recibe.
Una niña o niño amamantado tiene menos probabilidades de enfermar que uno alimentado con leche de fórmula. Esto se debe al aporte inmunológico que la madre le traspasa a su bebé
Por parte de la mamá, reduce el riesgo de cáncer de mama y ovario, así como depresión postparto y diabetes. También favorece su recuperación después el parto, contribuye a bajar de peso después de dar a luz y crea una mayor conexión y bienestar con su hijo.
Ahora ya conoces una técnica que puede facilitar esos procedimientos médicos dolorosos para tu bebé. ¿Lo pondrás en práctica?
