La actual Ley de Mitigación y Adaptación al Cambio Climático y Desarrollo Sustentable no establece fechas concretas para retirar de circulación los vehículos de combustión

 

El diputado local del Partido Verde Jesús Sesma Suárez consideró relevante aprobar una reforma para fijar metas concretas en la prohibición de la venta y circulación de automóviles de gasolina, a fin de disminuir en México las consecuencias del efecto invernadero.

 

Argumentó que la actual Ley de Mitigación y Adaptación al Cambio Climático y Desarrollo Sustentable no establece fechas concretas para retirar de circulación los vehículos de combustión.

 

El congresista capitalino propuso a los ciudadanos estar pendiente del Índice de Calidad del Aire y seguir las indicaciones de las autoridades para el cuidado de grupos sensibles, así como de la suspensión de actividades al aire libre y del programa Hoy No Circula.

 

Son recomendaciones que el legislador consideró relevantes en la actual temporada, porque en invierno se presenta un aumento de los contaminantes.

 

Se refirió Jesús Sesma a la necesidad de impulsar medidas destinadas a la reducción de las emisiones provocadas por los vehículos de combustión, ya que tienen un impacto considerable en la calidad de vida de la población. Y recordó la relevancia de retomar la propuesta que él hizo en la Cámara de Diputados local, y que actualmente se encuentra en estudio, para establecer metas específicas en la Ciudad de México para prohibir definitivamente la venta y circulación de vehículos de gasolina antes del año 2032 y de vehículos híbridos antes del 2037.

 

Son propósitos que consideró cruciales para mitigar los efectos de los gases y compuestos del llamado efecto invernadero.

 

El legislador ecologista urgió a disminuir el uso de gasolina, diésel e hidrocarburos; se refirió a la urgencia de incluir en la ley las citadas disposiciones, y destacó que esta iniciativa surgió como respuesta al alarmante promedio de partículas contaminantes en el aire en la capital mexicana, el cual superó en más de tres veces los límites considerados deseables en 2020, alcanzando los 18,8 microgramos por metro cúbico.

 

Recordó que los efectos a la salud de los capitalinos generados por el incremento de partículas suspendidas van desde dolor de cabeza y la tos, hasta padecimientos como la neumonía, bronquitis, afectaciones del sistema nervioso central y enfermedades cardiovasculares.

 

Austria, Noruega, Dinamarca, Reino Unido y Escocia ya han establecido metas claras a corto y mediano plazo para prohibir la venta de vehículos a motor y restringir su tránsito, marcando un camino a seguir para una movilidad más sostenible y respetuosa con el medio ambiente, reseñó.