Se garantiza la calidad y el rigor académico, asegurando que los estudiantes adquieran los conocimientos, habilidades y valores necesarios para ejercer la abogacía de manera efectiva y ética.

 

En respuesta a las demandas cambiantes del mercado laboral y la necesidad de adaptarse a los desafíos del mundo jurídico contemporáneo, la Escuela Libre de Derecho de Puebla (ELDP) actualiza su plan de estudios para ofrecer una formación más eficiente, innovadora y especializada para darles a los futuros abogados todas las herramientas para integrarse al mundo laboral de manera inmediata.

 

El Maestro Roberto Mendoza Zárate, Director General de la ELDP, comentó que el plan de desarrollo educativo 2019-2024 establece como las universidades e instituciones de educación superior deben presentar propuestas innovadoras en sus planes académicos para asumir la responsabilidad de la formación de sus egresados.

 

Este nuevo enfoque curricular, que representa un cambio significativo en la tradicional duración de los estudios de Derecho, ha sido diseñado para proporcionar a los estudiantes las habilidades necesarias para enfrentar los complejos desafíos legales de la actualidad. A través de una combinación de cursos teóricos y prácticos, el plan de estudios busca fomentar el pensamiento crítico, la resolución de problemas y la ética profesional, elementos fundamentales en la formación de buenos abogados.

 

La decisión de adoptar este nuevo modelo educativo resalta la responsabilidad de las universidades en la formación de profesionales íntegros y competentes en el campo del Derecho. En este sentido, se enfatiza la importancia de ofrecer programas académicos actualizados y pertinentes que preparen a los estudiantes para enfrentar los desafíos reales que encontrarán en el mundo laboral.

 

Mendoza Zarate destacó que la institución está comprometida en garantizar la calidad y el rigor académico de este programa que tiene como duración un año y dentro del cual los exámenes son orales, asegurando que los estudiantes adquieran los conocimientos, habilidades y valores necesarios para ejercer la abogacía de manera efectiva y ética. Esto implica una revisión exhaustiva de los contenidos curriculares, así como la incorporación de metodologías pedagógicas innovadoras que fomenten el aprendizaje activo y la participación de los estudiantes en su proceso formativo.

 

La implementación de este nuevo plan de estudios también refleja la capacidad de adaptación de las universidades ante los cambios sociales, tecnológicos y económicos que impactan en el ejercicio profesional del Derecho. Al ofrecer una formación más flexible y centrada en las necesidades del mercado laboral, la institución educativa busca garantizar que sus egresados estén preparados para sobresalir en un entorno legal cada vez más dinámico y globalizado.