La capacidad de Florentino Pérez de reinventarse es evidente cuando se analiza su nueva estrategia para fichar jóvenes promesas que pronto se convierten en figuras.

 

El Real Madrid de Florentino Pérez ha cambiado de forma diametral su política de fichajes. Si bien en la primera etapa del presidente al mando de la entidad llegaron los Galácticos y, ya en la segunda, Florentino siguió apostando por desembolsos millonarios por estrellas mundiales, el mandatario ha cambiado en los últimos años su política de fichajes y la forma de conseguir a las nuevas estrellas mundiales.

 

Como si fuera un curso de reciclaje, el presidente del Real Madrid hizo un análisis del mercado actual que lo llevó al cambio de rumbo. Desembolsar 300 millones de euros cada año para fichar a un par de mega jugadores es algo que se puede hacer una vez cada diez años en estos tiempos.

 

Más que nada porque, tras la pandemia, los clubes tuvieron que apretarse el cinturón por dos motivos: por las pérdidas derivadas de la COVID-19 y por la irrupción de los clubes estado contra los que ningún club ha podido competir a nivel económico.

 

Y es que el propio Florentino Pérez lo ha dicho en multitud de ocasiones: hay que reinventarse. Y vaya si lo ha hecho. Los únicos desembolsos importantes en los últimos años han sido Eden Hazard, de quien en la Casa Blanca ya se han olvidado, y Jude Bellingham. Los 103 millones de euros fijos (más el 30% de ese montante en variables) que ha costado este ultimo se estiman como “baratos” viendo el rendimiento del internacional por Inglaterra.

 

Pero Bellingham tiene 20 años. Y Vinícius Júnior, 23. Y Rodrygo, 22. Y Aurélien Tchouaméni, 23. Y Eduardo Camavinga, 21. La juventud de los talentosos madridistas es patente, al igual que la forma de fichar. Ahí es donde emerge la figura de Juni Calafat, excomentarista deportivo en el espectro mediático merengue y que, gracias a su visión de talento, fue captado por el Real Madrid en el 2014.

 

Florentino empezó a contar con Calafat para confirmar que su llegada era importante en los jóvenes talentos mundiales. Su presencia en el mercado brasileño y sus asesores en Europa dieron con la tecla en varias ocasiones, convirtiéndose en uno de los referentes del futbol mundial. Además de su ojo, su capacidad para tratar a los jugadores de forma personal ha sido clave para varias de las operaciones realizadas.

 

De hecho, cuentan desde el club a ESPN que “no es la primera vez que tenemos desventaja en una operación y Juni le da la vuelta a la tortilla en apenas dos semanas”. Por eso Juni y su equipo es sagrado dentro del club. Además, su trabajo habla por ellos mismos y se han ganado el respeto de todos.

 

Juni Calafat propone, el club da el ok y el grupo de trabajo del brasileño se pone manos a la obra para intentar convencer a las jóvenes estrella para acabar jugando en el Santiago Bernabéu.

 

Gracias a ese nuevo rumbo como club, el Madrid prefiere invertir en juventud para dar tiempo a los futuros cracks mundiales a desarrollarse y guardar las grandes sumas de dinero para megaestrellas que marcarán la diferencia de forma inmediata.

 

Eso, combinado con una juventud insultante, ha hecho del Real Madrid uno de los clubes con más potencial a medio plazo del planeta. La fórmula funciona y, de momento, no hay previsión de volver a los grandes dispendios anuales que no garantizan títulos.