La problemática que se le ha cargado al Tri por el grito discriminanatorio está poniendo cada vez más en riesgo a los clubes del futbol mexicano

 

Armando Martínez, presidente del Pachuca, reconoció que la problemática que se le ha cargado a México por el grito discriminatorio, está poniendo cada vez más en riesgo al balompié azteca.

 

Hoy no se trata solamente de la Selección Mexicana, sino que esta vez los clubes han empezado a padecer el riesgo de un castigo, como sucedió con Cruz Azul, que fue sancionado con un partido en el Azteca a causa del famoso 'grito' en su juego anterior.

 

También, previo a este suceso, Ricardo Ferretti ha creado polémica por unos comentarios en tono homofóbico durante la conferencia de prensa, al término del duelo entre Tigres y Juárez.

 

Armando Martínez no dudó al sostener en entrevista con ESPN Digital, que "es un problema que se ha complicado mucho, porque mientras más medidas restrictivas se ponen, más lo hacen. Tenemos que hacer una campaña más a fondo para erradicar eso que se ha vuelto parte de la idiosincrasia del mexicano".

 

"Deberíamos tener acciones más fuertes hacia los aficionados por parte de la ley y de los equipos. Tenerlos bien ubicados y sacarlos de los estadios, pero no nada más sacarlos, sino también vetarlos tres, cuatro, cinco años, o lo que sea necesario. Porque hasta que no pierda un equipo los puntos, o hasta que no veten un estadio, o hasta que nos quedemos sin un Mundial, es como vamos a entender, por desgracia".

 

Dijo que "aunque lo hacen dos mil, tres mil, cuatro mil, ahora sí que a los que tengas detectados, ya sea 20, 30, 50,100 de un estadio, vetarlos, y que eso sirva como ejemplo para todos los demás".

 

Sobre el partido de veto al Cruz Azul, manifestó: "La tenemos muy difícil; a mi también me vetaron el estadio y son unas reglas muy estrictas. Yo creo que tendríamos que analizarlas, porque es muy difícil poder controlar eso. Es como cuando se metió la gente al Azteca, o como cuando se metió a mi estadio".

 

Armando Martínez Patiño explicó: "Si no tenemos rejas, es imposible poder controlar a toda la gente, o que te que te veten, o que te hagan un aviso de veto. Está completamente fuera de tus manos, porque si hay una gente que se quiere meter, siempre va a lograr meterse. Igual acá, si hay una gente que quiere gritar es imposible que la puedan controlar".

 

"Mi solidaridad para Cruz Azul y hay que ver qué se puede hacer para el futuro", concluyó.

 

Por su parte, Rodrigo Fernández, director deportivo del León, fue menos explícito, aunque admitió también que la situación ésta muy complicada, ya que los aficionados no han entendido la gravedad del asunto.

 

"Es un tema muy complicado y difícil. Todos estamos trabajando junto con la Liga MX", se limitó a señalar a este portal.

 

"MI APOYO SIEMPRE A LA DISCIPLINARIA"

 

Por último, el presidente de la Liga MX, Mikel Arriola, dejó claro ante este portal que "la Comisión Disciplinaria es independiente", y como tal, anunció su decisión de sancionar a los cementeros, tras que en varias ocasiones se escuchara el grito discriminanatorio en contra del portero de 'La Fiera' en el Azteca.

 

En este sentido, afirmó Mikel Arriola, que "apoyaremos lo que decida la comisión siempre".