La colocación de estas dos esculturas en el punto más alto supone la finalización de las torres de los Evangelistas días antes de las previsiones iniciales.

 

La basílica de la Sagrada Familia en Barcelona, una obra maestra del modernismo que es uno de los monumentos más visitados de España, culmina esta semana la construcción de las torres de los cuatro Evangelistas.

 

Según informó este miércoles la fundación encargada de la construcción de este templo católico, la torre de Mateo es coronada con su escultura este miércoles y la de Juan el jueves.

 

La colocación de estas dos esculturas en el punto más alto, obra del escultor español Xavier Medina-Campeny, supone la finalización de las torres de los Evangelistas días antes de las previsiones iniciales, que apuntaban a que estarían listas en octubre, explicó en un comunicado.

 

La coronación de las torres con las esculturas de los evangelistas Marcos y Lucas ya se llevó a cabo en 2022, representados tradicionalmente con la figura un león y de un buey, respectivamente.

 

En cuanto a las dos torres que quedaban pendientes, las estatuas colocadas esta semana representan a un ángel (Mateo) y a un águila (Juan).

 

El 12 de noviembre próximo, la basílica celebrará una misa de bendición que marcará el inicio de las iluminaciones de las cuatro torres, que durará hasta Navidad.

 

Además, durante todo noviembre está prevista una programación de actos culturales para celebrar la finalización del conjunto de las torres.

 

La Sagrada Familia prevé terminar para 2026 la torre de Jesucristo, la más alta, pues medirá 172 metros, y la principal de todo el conjunto arquitectónico, en cuyo punto más alto se colocará la cruz, sin que todavía haya una fecha de cuándo estará finalizado todo el templo.

 

Uno de los elementos que quedará pendiente de construir una vez finalizada la torre de Jesucristo es la fachada de la Gloria, para la que se prevé la construcción de una gran escalinata.

 

La basílica proyectada por el arquitecto español Antoni Gaudí (1852-1926), considerado uno de los genios del modernismo, comenzó a erigirse en 1882 y su construcción se financia con donaciones.

 

La parte que llegó a construir el propio Gaudí fue declarada en 2005 patrimonio de la humanidad por la Unesco y en 2022 el templo recibió casi cuatro millones de visitantes.