La obra del misterioso artista, descubierta el pasado fin de semana sobre una pared del barrio, da al gran árbol que hay delante la apariencia de tener hojas de color verde.

 

En Estados Unidos se ha extendido un fenómeno conocido como ‘divorcio del sueño’, que consiste en la tendencia de algunas parejas a dormir separados en lugar de compartir la misma cama, con el objetivo de mejorar su descanso.

 

En algunos lugares se ha extendido un fenómeno que ya se conoce como ‘divorcio del sueño’ (‘sleep divorce’). Se trata de una tendencia que han adoptado algunas parejas que consiste en dormir separados en lugar de compartir la misma cama, con el objetivo de mejorar el descanso individual.

 

En Estados Unidos, por ejemplo, esta decisión está siendo cada vez más popular entre las nuevas generaciones. Incluso celebridades como la actriz Cameron Díaz han apostado por la normalización de los dormitorios separados, tal y como ella misma ha reconocido en alguna ocasión.

 

Así, con el objetivo de mejorar la calidad del sueño individual y el bienestar de ambos miembros de la pareja, la práctica ha ido ganando cada vez más adeptos. Históricamente, dormir en camas separadas era común, especialmente entre las familias de alto estatus económico, antes de la era victoriana. Sin embargo, con la revolución industrial y la migración a ciudades más pobladas, la práctica de dormir juntos se volvió más frecuente debido a la falta de espacio.

 

Una encuesta realizada en 2023 por la Academia Estadounidense de Medicina del Sueño reveló que más de un tercio de los encuestados duermen en camas separadas para mejorar la calidad de su sueño. Esto se correlaciona con los hallazgos de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), que sugieren que muchos estadounidenses no duermen lo suficiente.

 

Desde el punto de vista de la ciencia del sueño, la calidad del descanso nocturno es crucial para la salud física y mental. ¿Pero qué dicen los expertos sobre el ‘divorcio del sueño’? ¿Por qué algunas parejas eligen esta opción y qué beneficios o desventajas pueden tener?

 

‘Divorcio del sueño’

Pocos trabajos científicos han analizado este asunto, pero según los expertos en sueño, la decisión de dormir juntos o separados a menudo se basa en las preferencias individuales de cada persona y en la compatibilidad de sueño de la pareja.

 

Según Mark Aloia, profesor asociado de medicina en el National Jewish Health de Colorado, el ‘divorcio del sueño’ deriva de las parejas que han priorizado dormir mejor antes que estar cerca de su pareja en la misma cama. No en vano, se considera que no todas las personas son compatibles para compartir cama.

 

De hecho, algunos estudios sugieren que dormir separados puede conducir a un mejor descanso individual al minimizar las interrupciones y los factores que perturban el sueño. Por ejemplo, los molestos ronquidos, las preferencias por dejar la televisión apagada o encendida o las diferencias a la hora de irse a dormir son factores que pueden repercutir negativamente, con efectos como la privación crónica de sueño o fatiga.

 

Un estudio de 2017 descubrió que las personas que dormían con alguien que ronca demasiado fuerte tenían tres veces más probabilidades de tener problemas para conciliar el sueño y permanecer dormidas que aquellas cuya pareja no roncaba.

 

Otro estudio reciente reveló que las personas que compartían cama con alguien que se acuesta tarde declararon sentir que dormían peor que las que dormían con alguien que se va antes a la cama. Las parejas de los noctámbulos también presentaban más síntomas depresivos y signos de deterioro cognitivo, probablemente por la privación de sueño.

 

Beneficios de dormir juntos

Sin embargo, también existen beneficios emocionales asociados con dormir juntos, como la intimidad y la sensación de seguridad. La liberación de oxitocina durante el contacto físico puede promover una sensación de bienestar y mejorar la calidad de la relación.

 

Thomas Kilkenny, director del Instituto de Medicina del Sueño de Northwell Health en Staten Island (EE UU), afirma que tanto la actividad sexual como los comportamientos no sexuales, como los abrazos, pueden desencadenar la liberación de oxitocina, una hormona que induce un efecto calmante. El vínculo resultante y la sensación de seguridad entre la pareja pueden conducir a una sensación de haber descansado mejor.

 

Un estudio realizado en 2020 sobre el hecho de compartir la cama en parejas heterosexuales descubrió una relación entre dormir juntos y un aumento del 10 % en el sueño de movimientos oculares rápidos (REM), una de las fases del sueño que intervienen en el procesamiento emocional y la consolidación de la memoria.

 

Por otro lado, es importante tener en cuenta que la decisión de dormir juntos o separados debe ser mutua y basarse en una comunicación abierta y honesta entre los miembros de la pareja. Por tanto, no habría una respuesta única o correcta, y lo que funciona para una pareja puede no funcionar para otra, según los expertos en ciencia del sueño.

 

Sea como fuere, el objetivo es encontrar un arreglo que permita a ambas personas disfrutar de un sueño reparador y satisfactorio, según los investigadores. Si dormir separados mejora la calidad del sueño y fortalece la relación, entonces puede ser una opción válida y beneficiosa para la pareja.

 

Lo cierto es que existe una relación directa entre el sueño y la salud, a la luz de numerosos hallazgos científicos. Y es que, dormir lo suficiente es esencial para el buen funcionamiento del cerebro, la regulación del estado de ánimo, la memoria, el sistema inmunológico y el metabolismo.

 

Por el contrario, la falta de sueño adecuado se ha asociado con una serie de problemas de salud, que van desde el aumento del riesgo de enfermedades cardiovasculares y diabetes hasta la disminución del rendimiento cognitivo o la susceptibilidad a infecciones.

 

Referencias:

 

American Academy of Sleep Medicine. 'AASM Sleep Prioritization Survey. Sleep Divorce'. AASM (2023)

Adjaye-Gbewonyo D, Ng AE, Black LI. Sleep difficulties in adults: United States, 2020. NCHS Data Brief, no 436. Hyattsville, MD: National Center for Health Statistics (2022)

Guzman, M., Sgambati, F. et al. 'The Efficacy of Low-Level Continuous Positive Airway Pressure for the Treatment of Snoring' Journal of Clinical Sleep Medicine (2017)

Chi Chiao, Wen-Hsu Lin et al. 'Loneliness in older parents: marital transitions, family and social connections, and separate bedrooms for sleep'. BNC Geriatrics (2021)