Hoba es el meteorito más grande y pesado que se ha encontrado en la Tierra.

 

Hoba, también conocido como Hoba Oeste, es el más grande y pesado del mundo, y el fragmento de hierro natural más grande que se conoce en la superficie de la Tierra.

 

Su nombre hace referencia al lugar donde se encontró, situado a unos 20 kilómetros al oeste de Grootfontein y a 65 kilómetros al sudoeste de la ciudad minera de Tsumeb, en la región de Otjozondjupa, en Namibia.

 

En 1920, un agricultor estaba arando un campo cuando su arado se detuvo repentinamente. Curioso por lo que había encontrado, cavó en el suelo para encontrar un gran trozo de metal. El granjero había descubierto un meteorito de hierro de 66 toneladas, el meteorito individual más grande jamás encontrado y la pieza de hierro más grande hallada cerca de la superficie de la Tierra.

 

El Hoba es de forma tabular y mide aproximadamente 2,7 m por 2,7 m de ancho por 0,9 m de alto. Es muy plano en sus dos superficies mayores, algo poco usual. Se le dio el nombre de "Hoba" porque así se llamaba la granja donde fue encontrado: "Hoba West".

 

Esta gran masa de metal atrajo rápidamente la atención de los científicos y posteriormente fue identificado y descrito por el científico Jacobus Hermanus Brits, como un meteorito y retiraron el suelo a su alrededor para facilitar su estudio. 

 

El Hoba fue descubierto yaciendo horizontalmente sobre un terreno llano con su cara superior a ras del suelo. Aunque excavado, el meteorito no ha sido movido de su lugar de descubrimiento debido a su gran peso.  A lo largo de los 100 años transcurridos desde su descubrimiento, estudiosos, coleccionistas y vándalos desprendieron o cortaron numerosas piezas del fenomenal trozo de hierro.

 

Cuál es el meteorito más grande que se ha encontrado

Se conocen hoy 18 pedazos del Hoba en diferentes colecciones distribuidas por todo el mundo. Sin embargo, se calcula que, en total, tan solo se han desprendido unos 25 kg del meteorito original.

 

Los científicos estiman que se formó hace unos 300 millones de años y no se ha movido del lugar desde que impactó en la Tierra hace 80.000 años. Se compone de aproximadamente 84% de hierro, 16% de níquel y pequeñas cantidades de cobalto y otros metales. La abundancia de óxidos de hierro en el suelo alrededor del meteorito sugiere que pesaba mucho más de 66 toneladas cuando aterrizó y ha sufrido pérdidas significativas por oxidación.

 

Sorprende que este meteorito no esté rodeado por un cráter. Los objetos de este tamaño deberían atravesar la atmósfera a una velocidad muy alta y golpear la Tierra con la fuerza suficiente para dejar una importante huella en forma de cráter, sin embargo, en este caso no hay cráter alrededor del sitio del meteorito. No hay una explicación clara para ello, aunque se pueden aventurar varias hipótesis.

 

En primer lugar, recordemos la forma tan regular del meteorito, con caras rectangulares tan lisas. No es imposible que esta forma plana tan peculiar permitiese al meteorito ser frenado eficazmente en la atmósfera provocando una desaceleración de su velocidad de llegada a nuestro planeta. E incluso, si hubiese caído rasante, rebotaría ligeramente primero sobre la superficie de la atmósfera y luego sobre el suelo, de manera similar a como lo hace una piedra cuando la lanzamos sobre la superficie del agua en el popular juego de la rana. Pero también es posible que el bloque metálico hubiese caído sobre una masa de hielo y que el agujero formado hubiese desaparecido al fundirse el hielo.

 

Aunque actualmente hay establecidos unos complicados esquemas de clasificación, tradicionalmente los meteoritos se han catalogado en tres grandes grupos: rocosos (aerolitos), metálicos (sideritos) y rocoso-metálicos (litosideritos). Obviamente, el de Hoba pertenece a la clase de los meteoritos metálicos. Debido a su composición y a su alta densidad estos meteoritos sufren menos ablación, por fricción atmosférica, que los de las otras clases y, por ello, suelen ser de mayor tamaño.

 

Los meteoritos metálicos se clasifican, a su vez, de acuerdo con su composición. El meteorito Hoba pertenece al grupo de las ataxitas, que se caracterizan por su alto contenido en níquel (16 %), también tiene trazas de cobalto y una abundancia muy baja de elementos volátiles.

 

Sea como fuere, el meteorito de Hoba es un objeto fascinante y absolutamente excepcional. Los pesos de los tres meteoritos que le siguen no llegan a la mitad del peso del primero.

 

En 1980 el granjero donó al Estado el meteorito y el lugar donde se encuentra, esto ha convertido al lugar en un centro turístico.

 

El meteorito fue declarado monumento nacional en 1955.