La subvariante BA.2 de Ómicron tiene mutaciones que podrían alterar su comportamiento y ha comenzado a dominar partes de Europa y Asia.

 

La nueva cepa denominada 'Ómicron silenciosa' (o BA.2) parece ser más infecciosa que la cepa dominante actual y ya se ha vuelto la variante dominante en Dinamarca, por ejemplo, donde el Statens Serum Institut (SSI) ha afirmado que los cálculos preliminares sugieren que BA.2 podría ser 1,5 veces más infeccioso que su predecesor BA.1 (Ómicron original).

 

Actualmente, Ómicron, la variante más transmisible del virus Sars-CoV-2, cuya forma más común se conoce como BA.1, representa casi todas las infecciones por coronavirus en todo el mundo. Pero, en los últimos días, los científicos están rastreando un aumento en los casos causados por un primo cercano de Ómicron, BA.2, que está comenzando a superar a BA.1 en partes de Europa y Asia.

 

Pero, ¿qué sabemos sobre esta subvariante?

 

Ambas, BA.1 Y BA.2 están estrechamente relacionadas genéticamente, pero cada una presenta mutaciones que podrían alterar su comportamiento. La subvariante de Ómicron es más contagiosa aún, algo que podría ralentizar el descenso en el número de casos de COVID-19 en esta caía de la sexta ola en la que nos encontramos ahora mismo.

 

Pero, a pesar de ser más contagiosa, la variante silenciosa parece ser menos peligrosa y grave, según datos del Statens Serum Institut (SSI), la principal autoridad de enfermedades infecciosas de Dinamarca.

 

En Estados Unidos, la variante circula en más de la mitad de los estados de EE. UU., con al menos 127 casos conocidos en todo el país, según revelaron los Centros para el Control y la Protección de Enfermedades (CDC).

 

La semana pasada, BA.2 fue designada como una variante bajo investigación, por lo que actualmente no hay datos sobre la gravedad de la cepa. La Organización Mundial de la Salud ya advirtió de la capacidad de esta variante para generar mutaciones. Existen algunas alteraciones con respecto a BA,1, además de una variación en la proteína espiga, la que permite que el virus infecte y se multiplique aún más en las personas. Si provoca o no una enfermedad de COVID-19 más grave, será algo que tendremos que ver a medida que se vayan recopilando más datos. Por ahora, no hay diferencias en el riesgo de hospitalización de la subvariante a Ómicron.

 

En España, por ahora solo se ha secuenciado un caso aislado en la semana del 27 de diciembre, según informó el Ministerio de Sanidad.

 

Al igual que con otras variantes, los kits de pruebas de coronavirus para hacerse en casa pueden detectar una infección con esta variante de Ómicron silenciosa, aunque no pueden indicar qué tipo de variante es con la que nos hemos contagiado.

 

Aprovechamos para recordar, una vez más, que las vacunas evitan que las personas mueran.

 

Vacunarnos, incluidas las dosis de refuerzos, continuar con el distanciamiento social, utilizar mascarillas y seguir las pautas locales, son las directrices que debemos seguir empleando.