El 5 de febrero de 2016, en la columna “Cachorros y Abuelitos de Echeverría: del 68 al 2018”, escrito por el columnista José Antonio Pérez Stuart para el portal del ‘Fondo de Cultura Económica’ destaca: “Porfirio Muñoz Ledo –a quien mi buen amigo Javier García Paniagua, cuando platicábamos a solas en su casa del Pedregal de San Ángel– me lo definía como “un hombre de grandes luces“, y que públicamente también se ha definido como masón”. Con esta breve anécdota el columnista nos brinda un pasaje de que Muñoz Ledo sabe de lo que habla.


Y no solo eso, el pasado 27 junio del año 2009 una nota en el periódico de ‘El Universal’ encabezó en su titulo “Muñoz Ledo invita a 61 Legislatura a Masones”. Y describe: “Al asumirse como hermano masón, Porfirio Muñoz Ledo aseguró que es honroso para él estar al lado de personajes como Benito Juárez. Aceptó encabezar un grupo de masones abocados al análisis de la relación con el Estado y que incluso puedan tener participación en la 61 Legislatura de la Cámara de Diputados y ante el gran maestro Eduardo Atzayácatl Retiz Licona, presidente de la Honorable Gran Logia del Valle de México, el también aspirante del Partido del Trabajo (PT) dijo que su relación con la masonería comenzó desde hace 50 años”, hasta aquí la nota.

 

 Lo anterior viene a colación pues minutos después de la toma de protesta de AMLO en 2018, el actual presidente de la Cámara de Diputados Porfirio Muñoz Ledo, calificó a Andrés Manuel López Obrador de “iluminado” y lo elevó a la categoría de personaje “místico”.

 

El 1 de diciembre de 2018, Porfirio Muñoz Ledo fue el encargado de recibir la banda presidencial de manos de Enrique Peña Nieto y se la entregó a Andrés Manuel López Obrador para que se convirtiera en presidente constitucional de México. Y la mantuvo al frente unos segundos antes de entregarla a AMLO, algo inédito en la historia de México.

 

En su página de Twitter, Porfirio Muñoz Ledo publicó un par de mensajes en los que aseguró que en el Palacio Legislativo pudo ver de cerca una especie de “transfiguración” cuando Andrés Manuel López Obrador recibió de sus manos la banda presidencial.

 

“Desde la más intensa cercanía confirmé ayer que Andrés Manuel @lopezobrador_ ha tenido una ‘transfiguración’: se mostró con una convicción profunda, más allá del poder y la gloria. Se reveló como un personaje ‘místico’, un ‘cruzado’, un ‘iluminado’)”.

 

Afirmó que Andrés Manuel López Obrador no es un protestante disfrazado, sino un verdadero ¡hijo laico de Dios¡, y pidió que la población lo cuide.

 

En un tercer mensaje que Porfirio Muñoz Ledo publicó en Twitter, explicó que sus expresiones son a título personal y que no contaminan sus deberes como presidente de la Cámara de Diputados. “Deslindo sin embargo, ese mensaje enviado desde mi Twitter personal que ocupo hace muchos años, de mis actos y deberes como Presidente de la Cámara de Diputados.- Porfirio Muñoz Ledo”.

 

En el mes de agosto de este año publiqué una columna titulada “AMLO y la Masonería” en donde describo que “en el pasado número de la revista Proceso (N. 2179) de fecha 5 de agosto de 2018 en su página 8 en relación a un reportaje de Álvaro Delgado establece “Para él (Manuel Clouthier Carrillo) la designación de Bartlett es un mensaje de López Obrador al grupo al que ambos pertenecen:.

 

-‘A esas sectas secretas que siempre tienen atrás a Benito Juárez. ¿Cómo se llaman?’.
- ‘¿Masones?’ Inquiere el reportero.
- ‘Esos. Yo no tengo nada contra ellos’, se quejaba Clouthier por el nombramiento de Barttlet y sus dimes y diretes con el ex gobernador poblano.

 

Lo que es un hecho innegable es que los mejores presidentes de México han sido Masones y con un claro compromiso con la justicia social, con la fraternidad, la igualdad y la justicia.


“El último presidente masón fue Adolfo López Mateos”, informó Ramón Sifri Jiménez, Venerable Gran Maestro de la Gran Logia Valle de México. Después de su periodo deviene la degeneración política de México con presidentes que no fueron masones como Díaz Ordaz, Echeverría, López Portillo, De la Madrid, Zedillo, Fox, Calderón y Peña Nieto.

 

 

Mención especial, es lo que redacta el propio Carlos Salinas de Gortari en su libro “un paso a la modernidad” en donde cuenta que su ingreso a la masonería fue un paso “casi natural. Mi abuelo materno había sido masón en grado 33. Ingresé a una Gran Logia, invitado por un amigo de la infancia, que años después sería líder del PRI en el DF. Respeté sus convicciones… pero, desde mi punto de vista, los masones vivían más del rito privado, que en una época fue clandestino, y esto era incompatible con el interés de tomar parte en las luchas abiertas y públicas de los grupos populares. Muy pronto solicité mi plancha de quite”. Por lo que no se puede catalogar a este presidente como Masón, desde luego su administración dejó entrever parte de su personalidad perversa, contario a lo que se persigue en masonería, hombres con sentido social.

 

Buenos presidentes Masones lo fueron Lázaro Cárdenas, Francisco I Madero. Abelardo Rodríguez, Venustiano Carranza, Eulalio Gutiérrez, Emilio Portes Gil, Pascual Ortiz Rubio. Miguel Alemán, Adolfo Ruíz Cortines, e incluso el vicepresidente Pino Suárez. En el siglo antepasado lo fue Guadalupe Victoria, Lucas Alaman, Melchor Múzquiz, Manuel Gómez Pedraza, Valentín Gómez Farías, Ignacio Comonfort, Miguel Miramón, Benito Juárez.

 

Por lo que con AMLO se recupera, después de más de 50 años, el sentido de la Fraternidad, de la Igualdad y de la Justicia. López Obrador aseguró en víspera de las elecciones que en caso de ganarlas el pasado 1 de julio, convocaría a una Asamblea que elabore una “constitución moral” fundada en valores como el amor y el bien común, principios masónicos. “Desde el antiguo testamento hasta nuestros días, la justicia y la fraternidad han tenido un lugar preponderante en el ejercicio de la ética social”, dijo AMLO quien abundo “preferencia por los pobres y los niños” al tomar protesta por el PES.

 

En su discurso, López Obrador afirmó que los “ciudadanos, mujeres y hombres de buena voluntad” que participen en esa Asamblea, elaborarían “una Constitución moral, un Código moral, así como existe una Constitución política, vamos entre todos a elaborar una Constitución moral”.

 

Y añadió que los principios de la “constitución moral” serían “la justicia, la libertad, la igualdad y fraternidad”, hasta aquí mi columna del pasado mes de agosto.

 

5 Maestro masones

 

Si alguien conoce de fraternidades Si alguien conoce la teoría y la praxis política desde sus entrañas es Porfirio Muñoz Ledo. El actual presidente de la cámara de diputados de de 85 años, posee con una larga trayectoria en la política y masónica.


Abogado con doctorado en ciencia política y Derecho Constitucional en la Universidad de París, fue presidente de los Estudiantes de Derecho de la UNAM, siendo discípulo  del Maestro Mario de la Cueva, Secretario de la Revista Universitaria Medio Siglo.

 

Subdirector de Educación Básica y Tecnológica de la SEP, Subsecretario de la Presidencia de la República, Subdirector de IMSS, Secretario del Trabajo y Previsión Social, Secretario de Educación Pública, y Presidente Nacional del Partido Revolucionario Institucional, en las gestiones de Luis Echeverría, José López Portillo y Miguel de la Madrid Hurtado.

 

Precandidato presidencial en 1976 y 1982 dentro del PRI. Fue consejero Cultural en la Embajada de México en Francia, Representante Permanente de México ante la ONU (donde le tocó ser Coordinador del Grupo de los 77 y, también, presidir el Consejo de Seguridad de la ONU, Embajador de México ante la UNESCO, embajador de México ante la Unión Europea con Fox.

 

Fundó el PRD, en donde formó parte de su consejo nacional, fue su representante ante el recién creado IFE y fue elegido su presidente nacional y 1999 pretender fallidamente la nominación a la presidencia de la República, que finalmente fue otorgada a Cárdenas.


Fue elegido senador de la república por el Distrito Federal -el primero de oposición por el PRD-, en las elecciones federales de 1988, desempeñándose como líder del PRD en el senado.

 

El 18 de agosto de 1991 Muñoz Ledo contendió por la gubernatura del estado de Guanajuato, representando al Partido de la Revolución Democrática. En 1997, fue elegido diputado federal plurinominal, coordinador de la bancada del PRD.

 

En su actividad legislativa fue tanto Senador Coordinador del Grupo Parlamentario del PRD en la Cámara de Senadores como Diputado Coordinador del Grupo Parlamentario del PRD en la Cámara de Diputados.

 

Sería el primer Presidente de la Cámara de Diputados de oposición en 1997, cargo en el que fue el primer político de oposición en responder un informe presidencial.

 

Contendió por la Presidencia de la República Mexicana en 2000, como candidato del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, declinando por Fox. Después del triunfo electoral de Vicente Fox, Muñoz Ledo fue nombrado coordinador de la comisión de estudios para la reforma del estado-


En la campaña electoral de 2006. Muñoz Ledo decidió apoyar al Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador en la búsqueda de la Presidencia. Fue conductor de televisión de Televisión Mexiquense durante cinco años, hasta enero de 2012, en el programa "Bitácora mexicana". Es articulista del Periódico, El Universal y Presidente del Movimiento Ciudadano Nueva República. Miembro y coordinador político del Frente Amplio Progresista en 2008. Fue elegido diputado federal plurinominal en 2009, por el PT, en dicha Legislatura se desempeñaría como Presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores.


Fue nombrado por el jefe de gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, Comisionado para la Reforma política del Distrito Federal y Secretario Ejecutivo de la comisión redactora del proyecto de Constitución para la Ciudad de México. Autor de numerosos artículos, publicaciones, ensayos y análisis de opinión.