Alfred Bosch, del gobierno de Cataluña dice que “hacer cuentas del pasado es un signo de madurez democrática porque permite mirarse al espejo y tomar conciencia de los errores y horrores cometidos”.

 

Mientras, para España resulta extemporáneo;

quizá debería acudir a Rigoberta Menchú cuando dice que el desprecio

y la explotación de los pueblos indígenas americanos no es nada del pasado,

sino algo presente y silenciado.

O bien, acudir a los historiadores demógrafos

Cook/Borah/Simpson (Univ. Berkeley. EUA; conferencia, Estocolmo 1960)

donde señalan para México una población de 11 millones de habitantes en 1519,

la que disminuyó en 1607 a 2 millones de indígenas

(solo en México; falta en América del Sur).

No olvidar que civilización y progreso, significan

desarrollo, bienestar y crecimiento de la población; no al revés.

Le recordamos que los de Castilla/España conservaron y perfeccionaron 

el sistema tributario indígena basado en número de familias y varones (Cook);

lo cual sirvió de base para estimar la disminución

abismal de la población existente, pasando luego todas las poblaciones indígenas

a tributar al nuevo imperio Castellano.

Reflexione: la explotación humana y material de la América Latina indígena, constituyó

el sustento del Renacimiento europeo…!

Pablo Hughes Reyes (Uruguay 1946)

 

Usted sabe, Pedagogía, es el conjunto de técnicas y métodos para transmitir información y construir conocimientos (y conductas) para cumplir los objetivos de un plan educativo. Egoísmo diremos es el: excesivo sentimiento y actos de aquellos individuos que los lleva a preferir el beneficio personal por

sobre compartir los resultados logrados, tomando en cuenta que la interdependencia social

es quien permite multiplicar los beneficios…

 

Así, la globalización (sobornos, sueldos bajos, monopolios; tecnologías para llevar a la quiebra a la oposición; instrumentación de crisis financieras e invasiones militares, etc.) para ser exitosa, utiliza la educación como una de las herramientas para manipular la mentalidad y la percepción de la realidad; no para liberar, sino para someter a la sociedad. Recuerde, las leyes, la religión y las ideas de la educación expresan los intereses de las clases dominantes para perpetuarse en el poder.

 

No olvide, los bancos, requieren pueblos pobres para prestar dinero y consolidar la explotación con los créditos y las tasas de interés variables a modo, para encarecer o disminuir la deuda, disminuir o aumentar el plazo.

 

Estos comentarios de Pedagogía del Egoísmo estan basados en notas de Enrique Javier Díez Gutiérrez, (Universidad de León, España) e incluye comentarios del profesor Hughes.

 

Hoy en día, es necesario defenderse de las tendencias que impone la globalización contra la educación pública, universal, laica, inclusiva, co-educativa, ecológica, integral, no aburrida ni memorista, constructora de conocimientos y democrática, frente al neoliberalismo que pretende convertirla en negocio solo posible para quienes puedan pagarla y no, como un derecho social y obligación de los gobiernos como transferencia del pago de impuestos.

 

Estamos ante dos proyectos ideológico-sociales que avanzan a nivel mundial y que encarnan 2 formas diferentes de entender y construir al ser humano. Uno, asienta sus raíces en el modelo capitalista apoyando programas educativos al servicio de la técnica para atender la demanda de los consumidores, los intereses de concentración de la riqueza en las elites y monopolios para controlar la ciencia, la salud y las fuentes de energía para mover la economía.

 

El otro modelo educativo, es social, inclusivo, para la formación de individuos críticos y comprometidos con la ciencia para mejora de la humanidad; un modelo de educación realmente “pos-capitalista, pos-colonialista, pos-patriarcal, pos-corrupción, pos-la violencia, pos-endeudamiento y pos-la pobreza” dentro de un horizonte de pos-modernidad libertaria sin egoísmos para la abundancia y mutua cooperación construyendo un futuro para la juventud dentro de fronteras temporales cuya brevedad nos urge a poner orden en la república basados en diferentes principios educativos tales como:

 

*limitar el mercado educativo neoliberal y salarios empobrecedores;

*estimular la economía inclusiva mas que lucrativa; 

*no comercializar la educación como mercancía, sino como un valor para crear abundancia distribuible entre la sociedad;

*convertir la pedagogía neoliberal en comunitaria;

*buscar la excelencia educativa: dar a cada quien según sus necesidades y exigir a cada quien según sus capacidades;

*eliminar los déficit en la educación;

* construir una sociedad equitativa y libertaria; 

*ser cada quien una empresa de mí mismo y una republica con autogobierno basado en la armonía de los tres yoes;

*superar la sociedad del interés individual, el lucro, los privilegios y el egoísmo;

*eliminar la avaricia porque corroe la solidaridad, lealtad, el patriotismo y la competitividad;

*construir el neo-sujeto emprendedor; con menos pereza y cobardía;

*no olvidar que el adversario esta adentro, no afuera;

*hacer complementarias las etnias nacionales en una gran tribu porque solo unidos sobrevivirá la nación

y vendrá la grandeza…

 

Por lo anterior, no debemos concebir la educación solo como inversión para asegurar un futuro laboral y mejores puestos en las ficticias “escalas sociales” lo cual constituye una parte sustantiva de la Pedagogía del Egoísmo, eje emocional del neoliberalismo educativo; más aún, sabedores que de los 3 cerebros de la biología, el emocional predomina sobre el racional y el instintivo (Diez/Hughes).

 

Continua Díez Gutiérrez. Algunas empresas usan como mercadotecnia un nuevo movimiento: el “yoismo” basado en una supuesta fórmula de felicidad que consistiría en “dejar de pensar tanto en todo, para pensar más en ti mismo”; aprender a superar las crisis “cambiándote a ti” y no las reales condiciones de explotación del entorno económico (Díez);  construir “una república hacia adentro de tu casa” exaltando los valores del “neoliberalismo emocional” en el que se miente acerca del amor: “quiérete a ti mismo”, “practica el yoismo”, “cree en ti”, “no necesitas a nadie”, “estar solo es cool”, “vuela más solo y libre”, etc.

 

Los millones de slogans producidos por la cultura neoliberal para justificar el actual capitalismo salvaje genera en el inconsciente colectivo el material suficiente que sirve de ancla para la sumisión-servidumbre enajenantemente voluntaria para dejarse manipular cual camino a la felicidad (Díez).

 

Se está produciendo así un tipo de “revolución individual/egoísta” que naturaliza e incluso exalta las posiciones ideológicas del “egoísmo” como una virtud hacia el éxito. Estimula el interés propio, la competitividad y el triunfo del capital como pasaporte único al bienestar y la felicidad, en un contexto que define las relaciones humanas como jungla de lucha constante y selección darwinista en donde para triunfar hay que atropellar a los demás con las mil estrategias anónimas de la globalización y si es necesario, sobornando. 

 

Así. Toda posibilidad de proyecto comunitario basado en la equidad y la justicia queda desplazado o arrinconado en el imaginario de lo utópico, hipotético, populista, comunista, irrespetuoso e injusto frente a la libertad y la democracia, etc.

 

Está claro que no solo vivimos una guerra inequitativa dentro de la economía (“changarros” contra monopolios), donde el saqueo de los recursos colectivos se realiza desde oficinas de EUA, Europa y  Wall Street (EUA 1817) guiados por el Ibex (España 1992 indicador bursátil). Asistimos a una guerra ideológica, que impone imaginarios colectivos ”afines” al pensamiento dominante y al sometimiento encubierto hacia la pobreza via inflación, salarios bajos, escolaridad insuficiente y promoviendo luchas fratricidas.

 

Por ello, el desempeño de sistemas educativos en esta construcción libertaria es determinante para vencer la “deep globalizacion” de las economías virtuales adueñándose de casi todo con solo entintar e imprimir papel moneda (exitoso fraude de 500 años...).

 

La aparición del sistema financiero internacional, la FED en 1913 fusiono los bancos europeos y de los EUA promoviendo la doctrina de la globalización en complicidad con la iglesia católica que apoyó a los luteranos guardando silencio al permitir y “santificar” el cobro de tasas de interés del dinero desde 1750, donde cada dólar empobrecedor ha valido las penas creadas consolidando los sobornos e invasiones militares como herramientas anónimas de dominación y salvadoras financieras de las iglesias, no de las almas de la humanidad.

 

Aplicando propuestas de la Italia fascista (1918-1939) fue posible controlar la mente de la gente, su corazón y sus manos. De esta forma, el discurso neoliberal del egoísmo es visto actualmente como una condición “natural, normal y de moda” de la humanidad (Díez).

 

El neoliberalismo, es en esencia un capitalismo oculto y brutal apoyado en ideologías consumistas, religiones cómplices y lucrativas sin contemplaciones. Son la expresión más reciente para describir la lucha de clases entre una minoría enriquecida con solo aplicar tasas de interés al dinero a costa de empobrecer  hasta límites genocidas, con la agravante del “pillaje planetario” de la naturaleza y del conocimiento lo cual constituye el problema ético contemporáneo de la ciencia, al comprar talentos cuyos descubrimientos luego son usados contra la humanidad (Díez/Hughes).

 

Esta ideología se ha extendido como un virus por el planeta, imponiendo la adoración de los “antivalores” de la sociedad neoliberal. Una mono-cultura que maneja la misma información y noticias en todos los países, las mismas verdades y las mismas mentiras, bobadas, chismes, novelas, intrigas y dizque la historia donde se idolatran los mismos artistas “basura”, música “maloliente” y las mismas películas “mierda” derramando banalidad sobre millones de autos contaminando; las mismas modas y se soportan los mismos anuncios empresariales que pueden estar enfermando y hartando a la sociedad para que decida “cualquier opción inducida”.

 

En esta manipulación colectiva se incluyen los anhelos, las imágenes dominando los sueños y los sueños determinando las acciones hacia esa “libertad/felicidad” hueca, falsa y con la soga al cuello (deudas y promesas inalcanzables) donde la enajenación (mentiras y frustración), la manipulación y el fatalismo de la pobreza lleva al control de las mentes y las “esperanzas” a través de la persuasión y la limitación de opciones (algo así como adentro de un cajero electrónico). Hughes.

 

Las hamburguesas y los refrescos ante la complacencia gubernamental convierten en “panzones y mentes huecas” a los ciudadanos y entran en conflictos de salud y autoestima consigo mismos enfrentando los “3 yoes” de cada persona sin lucha interna ni externa hacia la libertad sino complicidad y hartazgo hacia la verdad maltratada, mentida y en duda.

 

Por estas acciones a largo plazo, todo imperio perdura al domesticar las almas con la pobreza, el endeudamiento y la casi nula escolaridad (como en México cuyo promedio nacional es menor a 9 años).

 

La clase trabajadora nunca se hubiera “convertido” voluntariamente al neoliberalismo mediante la sola propaganda del modelo. Ha sido preciso instalar “una estrategia multifactorial” con mecanismos de “educación del espíritu”, de control del cuerpo (con vanalidades y narcisismos), de organización del trabajo, de reposo y de ocio (alcohol y Tv), basados en una nueva doctrina de “individualismo tecnológico” de seres humanos de la 5G hacia el inframundo.

 

El paso inicial consistió en inventar la moneda, las tasas de interés, el endeudamiento y dos “seres humanos: una minoría con dinero y una mayoría sin dinero” dentro de un marco de relaciones enfrentadas entre sí como base esencial del modelo.

 

Se asienta así este “modelo pedagógico” en el egoísmo individualista del mínimo esfuerzo, gusto por la pereza, la cobardía, sin lealtad, solidaridad ni cooperación mediante discursos que alegan que la búsqueda del interés propio es la mejor forma mediante la que un individuo puede servir a la sociedad, donde el egoísmo es visto casi como una “norma de éxito social” y las relaciones de competencia inequitativa y mercado se naturalizan y donde todo tiene precio y se puede comprar.

 

La finalidad del ser humano se convierte en la voluntad de realizarse uno mismo enfrentando a los demás. El efecto buscado en este “nuevo sujeto” es conseguir que cada persona considere que auto-realizarse es intensificar su esfuerzo por ser lo más eficaz posible, como si ese afán fuera ordenado por un mandamiento de su propio interior y así, a través del auto-engaño realizarse oprimiendo o bandalizando a los demás.

 

La empresa corporativa y los monopolios se convierten así, en el modelo “poderoso” a imitar, que define una nueva ética neoliberal, un ethos (comportamiento común que establece costumbres, carácter, emociones, etc.) que es preciso apoyar porque “abastece” el mercado mirándose cada quien a si mismo y que los procedimientos de premiación “global” se encargan de reforzar con publicidad prometiendo “inalcanzables”.

 

De esta forma cada persona se ve obligada a mirarse a sí misma y a comportarse en todas las dimensiones de su existencia como portador de un talento-capital individual que debe saber acrecentar constantemente como salvación única y omnipotente.

 

El primer mandamiento de la ética del emprendedor del egoísmo es “ayúdate a ti mismo” y dios lo hará por los demás. La gran innovación de la tecnología neoliberal consiste, precisamente, en manipular la guberna-mentalidad de los individuos, confundiendo la manera en que una persona “es manipulada” con la manera dizque que “se gobierna” a sí misma.

 

Elegir el centro educativo que más posibilidades pueda ofrecer de éxito; concebir la educación como una inversión que asegure un mejor futuro laboral y mejores puestos en la escala social; entender el aprendizaje como una constante competencia por el éxito individual que marque la diferencia frente a los otros; cultivar el mito del éxito personal como resultado del talento-capital sin considerar la inequidad frente a los demás (pobreza, desnutrición, disfunciones sociales, etc.) en el entorno ni el aprendizaje como un proceso social compartido buscando segregar cuanto antes a quienes se considera rivales, “perdedores” e inaceptables que dificultan el ascenso social en esa competencia animal cual enemigos demandando “rankings” dentro  de clasificaciones que visibilizan quiénes son los ganadores por “tener” y quienes los perdedores por buscar “ser” en esta competencia, etc.

 

Todo esto y más constituye la Pedagogía del egoísmo como eje emocional del neoliberalismo educativo, al que se suman los “huachicoleros de las universidades y los bancos” quienes golpean al estilo de Maquiavelo, es decir por: odio o por miedo a los indómitos o buscadores de la libertad y la riqueza académica frente a los privatizadores de las arcas públicas. Usted que opina?

 

Consejo Economistas y Ciencias de México.

“Ciencia es independencia para democracia ante la ley,

la historia, la educación y la economía”.