"Prioritario evitar que los hijos sean utilizados como objeto de negociación dentro de discusiones maritales"
Al destacar que los “Delitos Contra la Familia”, incluyendo el delito de sustracción de menores, aumentaron un 25.9 % durante la pandemia, según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), el diputado y presidente de la comisión de Administración y Procuración de Justicia del Congreso del Estado, Eduardo Castillo López, presentó la iniciativa para incrementar sanciones contra quienes utilicen a los pequeños con fines de presión, recurriendo a la antes mencionada sustracción de menores.
La iniciativa incluye adicionar el párrafo segundo del artículo 273 TER del Código Penal, con el propósito de aumentar hasta en una mitad la pena (contemplando la sanción máxima ya existente), por el delito de sustracción de menores.
Esto considerando que la sanción estima los casos en los que se utilice la violencia, ya sea física, psicológica, sexual, económica o patrimonial para sustraer al menor, y también contempla hasta una cuarta parte de sanción, si la persona que tiene la guarda o custodia, de hecho, o legal, tuviera alguna discapacidad física o mental, perteneciera a una comunidad indígena, fuera mayor de sesenta años o tuviera la calidad de migrante.
El también diputado por el distrito 23 de Acatlán de Osorio, mencionó que en varios países se encuentra tipificado el delito de sustracción de menores como el traslado de un menor de edad sin tener una causa legal que lo motive, por parte del progenitor que no es titular de su custodia, o por miembros de su familia o personas afines a un lugar no acordado con el otro progenitor, o con aquella persona que está legitimada para tener la guarda y custodia.
Ante los hechos se destaca que es muy común que esta conducta se ejecute durante una crisis familiar, separaciones o divorcios, y la retención del menor suele ser un medio de negociación entre los cónyuges, o para amenazar en busca de beneficios en la negociación de la separación.
Por ello el legislador se pronunció por darle un fin a esta clase de acciones, donde los hijos se utilizan como moneda de cambio y elemento de presión entre parejas sentimentales.
