A partir de este lunes, 30 empresas proveedoras de autopartes retomarán actividades a 30% de su capacidad productiva y en personal, tras casi 12 semanas de suspensiones por la pandemia de Covid-19 y luego de recibir los permisos de autoridades locales y federales.

 

Puebla, Pue. A partir de este lunes, 30 empresas proveedoras de autopartes retomarán actividades a 30% de su capacidad productiva y en personal, tras casi 12 semanas de suspensiones por la pandemia de Covid-19 y luego de recibir los permisos de autoridades locales y federales.

 

El secretario general de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) en Puebla, Leobardo Soto Martínez, explicó que las empresas requerían la reactivación porque las plantas automotrices en Estados Unidos, Asia y Europa reanudaron labores y solicitan suministros para poder producir.

 

Indicó que, para las plantas de Volkswagen y Audi, instaladas en Puebla, es vital tener a la par la proveeduría local para esta semana que entrarán a producir de manera gradual, luego de que en días pasados se llevó a cabo la capacitación sobre las nuevas medidas.

 

En total, dijo, regresan 7,000 trabajadores en forma escalonada a las 30 autoparteras que tienen permisos de Protección Civil estatal y están certificadas por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en cuanto a los protocolos de seguridad sanitaria.

 

El secretario general mencionó que también los trabajadores quisieron regresar porque su economía se ve mermada, ya que recibían 50% del salario durante los casi tres meses de paro.

 

Indicó que las autoparteras están repartidas en los distintos parques industriales de la zona metropolitana y en San José Chiapa, donde se ubica Audi, las cuales realizaron trámites durante un mes para reactivarse.

 

No obstante, admitió que será complicado que vean pronto una reactivación total de la industria automotriz, incluso, no sería en este año, mientras no haya una cura contra el virus.

 

Refirió que la CTM fue clara con las empresas para que se garanticen todas las medidas de seguridad sanitaria, porque los trabajadores están vulnerables tanto en el trasladado como en las áreas de producción.

 

Soto Martínez, que tiene a 26,000 trabajadores adheridos de 45 proveedoras, confió que se vayan sumando fábricas a la producción para contribuir con la reactivación económica.

 

En este tenor, insistió que hay necesidad de componentes por parte de las armadoras, que en el caso Puebla se queda 60% para Audi y Volkswagen, mientras que el resto va para otras plantas instaladas en el Bajío y norte del país.

 

FUENTE: El economista.com.