Alexander López Sánchez, originario de Juárez Coronaco del municipio San Matías Tlalancaleca, ha sido elegido para formar parte de la décimo cuarta generación del programa Una Apuesta de Futuro.  

En 2015 Alexander López Sánchez se enteró de la existencia del programa de becas Una Apuesta de Futuro, pero no fue sino hasta 2021 que se decidió a aplicar para continuar sus estudios y hoy cumple uno de sus sueños que es continuar sus estudios en la Facultad de Derecho y poder así ayudar a personas, que por injusticias –como fue el caso de sus padres–, pueden perder su patrimonio.

Alexander relató que fue en una conferencia que supo del programa Una Apuesta de Futuro, sin embargo, en ese momento además de que aún cursaba el bachillerato, no se sentía con el perfil necesario para poder aplicar para continuar sus estudios en UPAEP.

“Siempre hablaban de la labor social y perfil de liderazgo, actitud de servicio. En ese momento yo no me sentía con el perfil, además de que hablaban de dejar la casa y hacer cosas que en ese momento no me sentía capaz. En mi rutina del bachillerato solo me dedicaba a la Rondalla, la escuela y la casa. Y como soy cinta negra en Taekwondo, tomé la decisión por dar clases de Taekwondo al terminar el bachillerato. Sin embargo, es algo de lo que no me arrepiento porque gracias a ello, hoy estoy aquí, compartió.

Y es que dijo, el dar clases de Taekwondo en su comunidad, le dio la oportunidad de desarrollar habilidades que no sabía que tenía, como el simple hecho de dar una clase, de ser ejemplo para niños y jóvenes que lo veían no como la persona que les daba clases sino como un ejemplo e inspiración. “Eso me ayudó a crecer”, confesó.

No obstante, una de sus metas siempre fue estudiar, y al paso de los años se sintió en deuda consigo mismo y con sus padres por lo que decidió aplicar al programa Una Apuesta de Futuro, además, ya se sentía más seguro y con el perfil necesario para poder obtener una respuesta positiva.

“Ver a uno de mis mejores amigos graduarse como abogado fue algo que me movió. Era una deuda primero conmigo y luego con las personas que confiaban en mí, y aunque fue difícil dejar a mis alumnos de Taekwondo sé que les he dejado en ellos sembrada una semilla”, expresó.

Respecto a su decisión de estudiar Derecho, mencionó, eligió esta carrera porque quiere ayudar a personas que son víctimas de las injusticias.

“No me gusta ver las injusticias y no acostumbro a quedarme callado. Mis padres pasaron por situaciones complicadas laborales complicadas y en su momento mi padre perdió una casa por una deuda. Cuando tuve uso de razón me di cuenta que muchas cosas estaban mal, y sentí también una impotencia enorme de no poder hacer algo por ellos. Pienso en ayudar a personas que pudieran pasar por lo mismo”, compartió.

Agregó que de no haber sido aceptado en el Programa de Una Apuesta de Futuro, seguramente hubiera continuado dando clases de Taekwondo, pues asegura “Yo ya descubrí en qué soy bueno. Tengo que seguir ayudando a las personas y tengo que seguir haciendo labor social”.

Finalmente, mandó un mensaje a todas las personas que hacen posible el Programa de Una Apuesta de Futuro que con sus donativos les dan la oportunidad a jóvenes líderes comunitarios que como él tienen deseos de continuar con sus estudios y poner sus talentos al servicio de la comunidad.

“Cuando uno no confía en uno mismo, pero hay personas que sí lo hacen, y que nos dicen sí puedes, eso se agradece infinitamente. Y es este gesto de tener la confianza en nosotros lo que nos motiva a dar nuestro mejor esfuerzo. No hay palabras para agradecer esta oportunidad”, acotó.