BARCELONA -- Lionel Messi llegó a Barcelona en la tarde de este miércoles, tras liderar a la selección argentina que venció en Perú, y en la terminal del aeropuerto sorprendió con unas breves declaraciones, una excepción puesto que nunca atiende a los informadores, en las que dejó patente que tres meses después de la tormenta que provocó su intento de marcha la relación con el Barça sigue sin ser la mejor.