DÍA DE REYES. En este día donde los niños estrenan sus regalos Roberto Shimizu, director creativo del Museo del Juguete Antiguo México, cuenta que los primeros en la época indígena eran sonajas de barro y algunas talladas en hueso y piedra. Hoy son de plástico o digitales

 

Los primeros juguetes que se fabricaron en el mundo eran de madera y barro, después se disecaron animales para incrustarles un sistema autómata que les diera movimiento con una cuerda y posteriormente la industria del plástico invadió el mercado, productos que hasta hoy conviven con los juguetes digitales. Así lo explica Roberto Shimizu, director creativo del Museo del Juguete Antiguo México (Mujam).

 

Con motivo del Día de Reyes, Crónica presenta un acercamiento al museo que exhibe 60 mil piezas en sus siete salas ubicadas en la calle Dr. Olvera 15, colonia Doctores, alcaldía Cuauhtémoc.

 

“En la primera sala se observan juguetes de principio de siglo XIX, además hay unos de 1890 y 1900, son animales disecados ya que los franceses hacían la taxidermia, pero tienen un mecanismo adentro hecho por los suizos, son autómatas, son los primeros juguetes de la humanidad que tienen mecanismo adentro. Tenemos uno de 1900 que es un gatito disecado y, si le das cuerda, camina y maúlla”, indica Shimizu.

 

Si nos ceñimos a la historia de México, tenemos juguetes coloniales que son sonajas de metal, añade. “También tenemos juguetes prehispánicos que son sonajas de barro, incluso algunos tallados en piedra y huesos”.

 

-¿Qué tecnología modificó esos juguetes?

 

-Los juguetes coloniales estaban hechos en metal o porcelana, posteriormente el juguete se empezó a hacer de madera, incluso así empezó la fábrica de Lego, con pequeños cubos de madera. Lo que detonó a la industria del juguete fue el plástico, los polímeros hicieron que la industria explotara a nivel mundial y se empezaron a crear muchas fábricas de juguetes.

 

“En México, los años 70 y 80 del siglo pasado estaba prohibida la importación de productos, entonces empezamos a producir nuestros propios juguetes y surgieron las grandes jugueterías como Lilí Ledy, Cipsa, Plastimax, Jugarama, Juguetes Monte Carlo, que desaparecieron cuando se abrió al mundo entero la industria e inició la importación de juguetes de Hong Kong y China en los años 90”.

 

Después del plástico llegaron los juguetes electrónicos y digitales, añade Shimizu. “Surgió el primer perro de titán llamado Aibo que lo hizo Sony, ahora están las tablets, pero en los 60 y 70 del siglo pasado empezaron los videojuegos y las maquinitas en las tiendas, actualmente existen consolas muy avanzadas”, destaca.

 

Shimizu asegura que los niños se divierten más con los juguetes sin tecnología digital.

 

“Creo que los niños siguen amando los juguetes analógicos, si bien los juguetes digitales los distraen un rato, llega el momento en que se hartan de la tablet y se ponen a jugar con sus muñecos. Si bien pueden desarrollar virtudes con los juguetes digitales, para nada se compara con estar corriendo, imaginar y volar con la creatividad, tampoco se compara con los niños que salen y andan en un patín del diablo o bicicleta, esos niños activan su parte psicomotriz”, expresa.

 

VISITAS A LA BAJA. El director creativo del Museo del Juguete Antiguo México (Mujam) señala que durante la emergencia sanitaria por COVID-19 la caída de visitantes es del 90 por ciento.

 

“Ha sido muy triste la caída de visitantes. Antes, estas fechas eran importantes y ahora ha disminuido 90 por ciento las visitas. Por ejemplo, podrían haber llegado 150 personas en estos primeros días del año y hoy apenas llevamos dos”, narra Roberto Shimizu.

 

El Museo del Juguete junto con el Museo Soumaya fueron los dos primeros recintos culturales en abrir en la Ciudad de México durante los meses de confinamiento.

 

“Abrimos el 11 de agosto, fue una fecha histórica porque estuvimos preparándonos seis meses para esa apertura. Al principio llegamos a tener algunas visitas, sin embargo, para fin de año, estas fechas decembrinas y hasta Reyes eran días mágicos, de muchos visitantes”, destaca.

 

Roberto Shimizu comenta que de agosto a noviembre la entrada al Mujam fue gratuita.

 

“Nosotros vivimos de la entrada de las personas pero platicando con mi papá que es el fundador del museo, él siempre ha querido tener un agradecimiento con México y regresarle algo al país y lo que decidimos fue abrir el museo de manera gratuita para apoyar la economía de las familias. Nosotros no podemos donar equipo médico pero podíamos donar la entrada”, indica.

 

Los meses de enero y febrero la entrada al museo será al 2x1, es decir, 50 pesos. “Es un regalo y es para pagarle a los jóvenes que trabajan con nosotros, hay que buscar la manera de reactivar la economía”.

 

DATOS SOBRE EL MUJAM:

 

*Actualmente se exhibe una muestra de Barbie con más de 3 mil 800 ejemplares.

 

*Se exponen mil 500 piezas relacionadas a King Kong incluida la única maqueta que se usó para la película.

 

*Hay una sala dedicada a la lucha libre mexicana donde se muestra la máscara, botas y la capa de debut y despedida de El Santo