La rutina hace que dependas de la prolongada caducidad de los alimentos y de su buena relación con el microondas. Es un aparato indispensable y muy útil en la vida de cualquier adulto, no obstante podrías estarlo usando MUY mal.
El Departamento Estadounidense de Agricultura, Inspección y Seguridad Alimentaria (USDA, por sus siglas en inglés) cita —además del metal— algunos materiales y comestibles que deben mantenerse alejados de este electrodoméstico. Ponerlos a calentar ahí pone en riesgo tu nutrición, salud o hasta tu integridad física:
Huevos crudos
En tendencias gastronómicas hace poco destacó en redes sociales la idea rápida y práctica de cocinar un huevo en una taza. Parece la solución ideal, pero no es la mejor de las opciones para garantizar seguridad en el hogar.
La USDA asegura que excederse en el tiempo de cocción del huevo dentro del microondas puede provocar una explosión. En el mejor de los casos el único dañado será el microondas, pero una quemadura también puede derivar de ese "experimento". Además la calidad y el sabor del huevo de microondas NUNCA superará al confiable sartén.
Bolsas de papel o plástico
Estos materiales suelen contener tinta o pegamento que no sólo podrían quedar impregnados en tu comida. Muchos de los químicos presentes (como parafinas cloradas) generan tóxicos cuando se calientan, lo que puede llegar a ser letal aunque no notes un sabor extraño.
Más vale prevenir y vaciar lo que pretendas comer en una vajilla adecuada.
Carne congelada
Cuando la carne (de cualquier tipo) se calienta en el microondas por más de dos minutos pierde muchas de sus propiedades nutricionales (potasio, magnesio y calcio), pero ese es el menor de los problemas.
La USDA explica que muchas bacterias y parásitos viven en la superficie de la carne. Cuando no se desinfecta de manera correcta o viene contaminada desde el empaque, éstas bacterias pueden multiplicarse y encontrar un "nuevo hogar" en tu tracto digestivo.
Verduras crudas
Pueden causar "arcos eléctricos" o chispas debido a los minerales que aún están presentes en ellas (procedentes del suelo en el que se cultivaron).
Un arco prolongado derivado de una simple distracción podría ocasionar daños al electrodoméstico o un incendio.
Piezas de porcelana
Las toxinas presentes en estos materiales (dependiendo de su procedencia) pueden trasferirse a la comida y como mínimo darle un sabor desagradable. Una intoxicación sería la consecuencia más devastadora.
Por eso es tan importante revisar las tazas y los platos en la parte inferior y encontrar la leyenda "apto para mircoondas".
Lácteos
Como tal, no son peligrosos para tu hogar o tu salud dentro del microondas; pero sobrecalentar cualquier lácteo (por un minuto y medio o más) hará que pierda toda su vitamina B12.
Así que si buscabas ayuda en la B12 para mantener sanas las neuronas PERO calientas tu vaso de leche, esto tendrá la misma utilidad que beber un vaso de agua.
Hay otros alimentos que no se recomienda calentar en microondas: los mariscos se vuelven gomosos, el pan se pone chicloso y las sopas se calientan de manera irregular, sin embargo la USDA se limita a asegurar que perderán su sabor original. No representan ningún peligro.
¿Cambiarás tus hábitos con el microondas luego de leer esto?
