¿Qué pasa cuando todos los días son malos e ir a trabajar es una verdadera tortura? Aunque no parezca, tiene solución, por eso te damos estos consejos para superar una relación tóxica en el trabajo.

 

Los millennials hemos inventado todo tipo de etiquetas para nuestras malas decisiones y una de las más sonadas en los últimos años son las famosas "relaciones tóxicas". Sí, aquélla relación en la cual una o las dos personas sufren mucho más de lo que experimentan dicha y placer por estar juntas; uno de los integrantes -y en varios casos ambos- se ve sometido a un gran desgaste por tratar de sostener la relación. Seamos honestos, un gran porcentaje de nosotros hemos estado en este tipo de situaciones, algunos sabemos cuándo parar y otros simplemente continúan en una línea interminable de días buenos, malos y peores.

 

Pero algo muy importante en este tema es saber que no todas las relaciones tóxicas tienen que darse en el ámbito sentimental, ya que también pueden desarrollarse con la familia, amigos y hasta en nuestro trabajo; de hecho, de este último punto voy a hablarles, pues estoy segura que no soy la única que se ha cuestionado sobre su empleo.

 

¿Qué hago aquí? ¿Realmente necesito este trabajo? ¿Y si mejor renuncio? Me he preguntado eso decenas de veces, pero también he dicho todo lo contrario. La cosa es ¿qué pasa cuando todos los días son malos e ir a trabajar es una verdadera tortura? Es muy probable que la relación tóxica con tu empleo ya haya comenzado y ni siquiera lo hayas notado. No se trata de abandonar tu trabajo y buscar algo que cumpla tus expectativas, porque si eso fuera tan fácil tal vez no estarías sufriendo, entonces, ¿qué tal dejar de ser la parte tóxica de esa relación? Al final de cuentas, el trabajo ahí está y muy probablemente las cosas que tanto te molestan no cambien por sí solas, así que lo mejor que puedes hacer es ser responsable e irte o buscar soluciones.

 

Como todos, en algún momento he sido tóxica para la relación empresa-colaborador, cargándome de cosas negativas y dejando de disfrutar lo que tanto amo. Por eso, quiero compartirte algunos consejos que me han permitido mantener el vínculo lo más sano posible:

1.- Inicia el día con algo bueno: Agrega a tu rutina algo que te haga feliz, ya sea tomar café, escuchar tus canciones favoritas camino al trabajo o simplemente agradecer por todo lo bueno, cualquier cosa que te haga comenzar el día con una mentalidad positiva.

 

2.- Mantener tus metas sin olvidar tus sueños: Tener objetivos te ayudará a esforzarte más, recuerda que aunque todos buscamos estabilidad y vivir bien ¡no debemos nunca olvidar los sueños! Que tu trabajo te ayude a cumplirlos y tus sueños te inspiren a trabajar.

 

3.- Haz el espacio tuyo: Si trabajas en oficina seguramente tendrás un escritorio, así que lleva una planta, fotos de tus seres queridos o decora de una forma que te guste. Tener un espacio agradable hará que tu día sea mucho mejor.

 

4.- Haz amistades, vale la pena intentarlo: Es normal que muchas veces no seamos los más amistosos en el área laboral, pero es bueno compartir intereses con alguna persona, sobre todo si tienes que pasar mínimo ocho horas en un lugar. Tómalo en cuenta.

 

5.- No te guardes nada, deja que te escuchen: Ideas, consejos, molestias y palabras de aliento, sácalo todo pero siempre con respeto, sé empático y trata de impactar siempre de manera positiva con lo que dices.

 

6.- Que la envidia jamás cruce por tu mente: Siempre celebra que a otros les va bien, si alguien gana más que tú, si alguien tiene un puesto mayor y no lo consideras justo simplemente déjalo pasar. Agradece siempre lo que tienes y espera por lo que mereces.

 

7.- Haz una lista de momentos buenos: Alguna salida a comer, las felicitaciones que recibiste o un buen momento de risas durante el café, anota las cosas buenas y poco a poco serán más que las malas.

 

8.- Toma aire cada que lo necesites: No se trata de escapar todo el día de tus obligaciones, pero procura tomar unos minutos para despejarte y retomar fuerza.

 

9.- Sé fuerte y aprende a reponerte: En más de una ocasión tendrás malos momentos, regaños o roces entre colegas, pero debes mantener la calma y buscar soluciones, todo lo negativo es muy posible que se convierta en un buen aprendizaje si sabes controlarlo.

 

10.- Encuentra tu pasión: Si ya hiciste todo lo posible y todavía odias tu trabajo, puedes intentar un cambio de área dentro de la misma empresa, buscar un ascenso o solicitar nuevas actividades que te mantengan en aprendizaje.

 

No te permitas ser esa persona tóxica que contagia a los demás y solamente evita que la empresa crezca, porque en realidad el peor daño lo llevas tú. Si después de intentar con todo sigues odiando tu trabajo, es muy probable que esa relación ya no tenga solución y aunque las cosas no son nada fáciles en la actualidad tienes que recordar que ¡VIDA SOLO HAY UNA! Y no puedes desperdiciarla haciendo algo que no te gusta, no te rindas y sigue buscando lo que tanto quieres.