Un nuevo estudio expone que podría reducir estas infecciones casi a la mitad. Merece la pena el esfuerzo.
Una infección del tracto urinario puede afectar cualquier parte de este, incluida la uretra, la vejiga, los uréteres o los riñones. Las infecciones de vejiga son extremadamente comunes entre las mujeres. Ahora, una nueva investigación desarrollada por expertos del Simmons Cancer Center de la University of Texas Southwestern en Dallas (EE. UU.), muestra que aumentar la ingesta de agua podría reducir estas infecciones casi a la mitad.
Las mujeres tienen más probabilidades de desarrollar una infección de vejiga que los hombres debido a que su anatomía es diferente: la uretra femenina es más corta que la de los hombres, lo que significa que las bacterias pueden llegar a la vejiga con mayor facilidad. Además, la abertura de la uretra está más cerca del recto en las mujeres, y el recto aloja muchas bacterias. Estas bacterias suelen estar asociadas a infecciones urinarias.
Afortunadamente, las infecciones de la vejiga, cuando se detectan a tiempo, generalmente no causan complicaciones graves y son fáciles de tratar con antibióticos. Sin embargo, si no se tratan, pueden conducir a infecciones renales.
Estudio de la ingesta de agua e infecciones de vejiga
Antes del estudio, los participantes expusieron el volumen diario habitual de ingesta de líquido. Fue de aproximadamente 1,5 litros, o alrededor de seis vasos de agua.
Los científicos dividieron a los voluntarios en dos grupos: ordenaron al primer grupo que bebiera 1,5 litros adicionales de agua al día y se pidió al segundo grupo que no consumiera más líquido, como grupo de control.
El estudio se llevó a cabo durante un período de 12 meses y reveló algunos hallazgos. Por ejemplo, en el grupo que tomaron más vasos de agua adicionales, los científicos encontraron que el 93% tenía dos (o menos) episodios de infección de la vejiga, mientras que el 88% de los del grupo de control experimentaron tres o más.
En general, la incidencia de la infección de vejiga en el grupo que bebió más agua fue aproximadamente la mitad de la del grupo de control, es decir, 111 de las personas que bebieron más, informaron haber tenido una infección, en comparación con las 216 personas que no bebieron ese agua adicional.
Además, si se produjo una recurrencia de infección de vejiga en un participante que ya había experimentado una durante el estudio, los que estaban en el grupo de tomar más agua contaron con un mayor período de tiempo entre infecciones que los del grupo de control.
Aproximadamente la mitad de las mujeres experimentarán una infección del tracto urinario a lo largo de su vida
El período de tiempo total entre las infecciones de vejiga fue de aproximadamente 85,2 días para el grupo de control, en comparación con los 142,9 días para los del grupo de ingesta superior de agua.
En general, aquellos en el grupo de agua tenían aproximadamente la mitad de probabilidades de experimentar una infección de vejiga que los del grupo de control. "Esa es una diferencia significativa", señaló Yair Lotan, líder del trabajo que recoge la revista JAMA Internal Medicine.
"Estos hallazgos son importantes porque más de la mitad de todas las mujeres tienen infecciones de vejiga, que son una de las infecciones más comunes en las mujeres"
Se sabe desde hace algún tiempo que beber mucha agua puede prevenir las infecciones de la vejiga y otras infecciones urinarias, ya que ayuda a eliminar las bacterias que intentan llegar a la vejiga. Este estudio ha ayudado a confirmar esa noción, y aunque beber mucha agua puede ser un hábito difícil de adquirir, definitivamente es una buena idea, especialmente para las mujeres.
Referencia: Effect of Increased Daily Water Intake in Premenopausal Women With Recurrent Urinary Tract InfectionsA Randomized Clinical Trial
Thomas M. Hooton; Mariacristina Vecchio; Alison Iroz, ; et al Ivan Tack; Quentin Dornic; Isabelle Seksek; Yair Lotan. JAMA Intern Med. Published online October 1, 2018. DOI: doi:10.1001/jamainternmed.2018.4204
