EL OZONO ES CONOCIDO POR SUS PROPIEDADES DESINFECTANTES Y UN NUEVO ESTUDIO CONFIRMÓ SU EFECTIVIDAD PARA DISMINUIR LA POTENCIA DEL VIRUS HASTA EN UN 90 %

 

La desinfección de espacios, objetos de uso cotidiano y superficies se convirtió en uno de los temas más buscados desde el inicio de la pandemia de Covid-19.

 

Aunque la Organización Mundial de la Salud ha emitido distintas recomendaciones para la desinfección que se basan en el alcohol etílico, el cloro y el agua y jabón, la desinformación ha llevado a miles de personas a experimentar combinando sustancias y químicos que pueden causar daños tanto a la salud, como a los objetos y superficies en cuestión.

 

 A 8 meses del primer brote, el ozono se suma a la lista de sustancias cuya evidencia científica demuestra que resultan efectivas neutralizar el Covid-19, según una investigación elaborada por científicos de la Universidad de la Salud de Fujita, en la prefectura de Aichi, Japón.

 

Para poner a prueba la efectividad del ozono para desactivar el SARS-CoV-2, los científicos introdujeron un generador de ozono y muestras de coronavirus en una cámara completamente sellada.

 

DESPUÉS DEL EXPERIMENTO, LA INVESTIGACIÓN CONCLUYÓ QUE UNA CONCENTRACIÓN DE OZONO ENTRE 0.05 Y 0.1 PARTES POR MILLÓN DE UNIDADES (PPM) ES ALTAMENTE EFECTIVA PARA DISMINUIR LA POTENCIA DEL VIRUS HASTA EN UN 90 % CUANDO LAS PARTÍCULAS SE EXPONEN AL OZONO DURANTE DIEZ HORAS.

 

“La transmisión del nuevo coronavirus puede reducirse con un tratamiento continuo con ozono de baja concentración, incluso en ambientes donde hay personas utilizando esta clase de sistemas, explicó el líder de la investigación, Takayuki Murata.

 

Relacionado: Por qué no debes usar cubrebocas con válvulas

 

Aunque desde el inicio de la pandemia se había especulado sobre la efectividad del ozono para desinfectar automóviles, oficinas, autobuses y toda clase de entornos, se trata de la primera evidencia científica que confirma este efecto.

 

Sin embargo, a pesar de su eficacia como desinfectante, el ozono en altas concentraciones puede ser nocivo para la salud y por lo tanto, está completamente desaconsejado utilizarlo más allá de los fines industriales, cuyas aplicaciones más comunes se llevan a cabo en albercas públicas o aguas residuales.

 

El hallazgo podría ayudar a idear sistemas de ventilación o implementar máquinas generadoras en espacios públicos en los que circula el virus y ayudar a reducir los contagios masivos.

 

Los resultados de esta investigación no tienen relación alguna con la ozonoterapia, un tratamiento alternativo que carece de evidencia científica y ha causado polémica en la comunidad médica alrededor del mundo, toda vez que las principales instituciones de salud del mundo lo consideran un gas tóxico, cuyos efectos benéficos en bajas concentraciones al introducirse en el organismo combinado con oxígeno no están confirmados.