La Organización Mundial de la Salud ha advertido que el virus puede transmitirse durante dos semanas más tras haber desaparecido los síntomas.

 

El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha expuesto en su última rueda de prensa que las personas que se han infectado con el nuevo coronavirus, cuya enfermedad se conoce con el nombre de COVID-19 y que ya han dejado de padecer síntomas aún pueden seguir contagiando el virus a los demás durante dos semanas. De ahí que haya pedido que no reciban visitas hasta que pasen otros quince días tras haber dejado de presentar síntomas y se consideren curados. Además, ha insistido en la importancia del acto de lavarse las manos frecuentemente para minimizar el riesgo de infección por el coronavirus, como "un acto de solidaridad".

 

"A medida que el coronavirus se traslada a países de bajos ingresos, estamos profundamente preocupados por el impacto que esto podría tener en las poblaciones con alta prevalencia del VIH o niños desnutridos. Hacemos un llamamiento a cada país e individuos para que hagan todo lo posible para detener la transmisión", explica el director de la OMS.

 

De la misma forma, la OMS también se queja de que algunas naciones no están realizando suficientes pruebas de coronavirus que ya ha infectado a más de 182 400 personas en todo el mundo (en el momento de escribir este artículo).

 

Tedros ha expresado su preocupación ante la rápida escalada de casos de COVID-19 durante la semana pasada,"pero no hemos visto una escalada lo suficientemente urgente en las pruebas, el aislamiento y el rastreo de contactos, que es la columna vertebral de la respuesta".

 

Tedros ha reconocido que, aunque la población de mayor riesgo de mortalidad por el nuevo coronavirus son las personas mayores de 60 años, han muerto jóvenes, e incluso niños, de ahí que sea crucial que los países no olviden realizar todas las pruebas de detección de COVID-19 que sean necesarias.

 

“Tenemos un mensaje simple para todos los países: pruebas, pruebas, pruebas. Prueben cada caso sospechoso. Si dan positivo, aisladlos y averiguad con quién han estado en contacto dos días antes de que desarrollaran síntomas y también evaluar a esas personas ", apuntó.

 

Y, en caso de contagio, permanecer en casa y no acudir a centros sanitarios para evitar una nueva transmisión del virus y recibir una atención médica adecuada.

 

Si bien es cierto que el director de la OMS no señaló a ningún país concreto, los líderes estatales y locales estadounidenses han criticado duramente a la administración Trump y a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los EE. UU. por retrasar y limitar quién podría hacerse la prueba en este país.

 

"Para cualquier país, una de las cosas más importantes es el compromiso político al más alto nivel", dijo Tedros. “Todos los países deberían poder evaluar todos los casos sospechosos. No pueden luchar contra esta pandemia con los ojos vendados; deberían saber dónde están los casos ".

 

En otros países como Corea, donde el virus se propagó rápidamente el mes pasado, los funcionarios de salud implementaron un régimen de pruebas agresivo que procesó pruebas para más de 259 000 personas y confirmó más de 8 000 infecciones, según los CDC coreanos.